Venecia 2013: Judi Dench conmueve y divierte con “Philomena”, ecologismo fanático y James Franco adapta a Cormac McCarthy
Querido Teo:
Judi Dench se ha llevado en Venecia una de las ovaciones más intensas de la historia reciente del certamen, según los habituales al mismo. Ha sido gracias a "Philomena", la película en la que Stephen Frears le ha brindado una joya de papel, con el que la gran actriz se permite el lujo tanto de conmover como de divertir, por la que es una de las máximas aspirantes en la inminente temporada de premios. En la película Dench se pone en la piel de una mujer irlandesa que en su vejez va en la búsqueda del hijo que dio en adopción 50 años atrás. Una road movie inteligente y conmovedora basada en una historia real con la que Dench y Frears se han metido en el bolsillo al público.
La cinta cuenta con el guión de Steve Coogan y Jeff Pope y Judi Dench sale del certamen (gane la Copa Volpi o no) como una indudable favorita al próximo Oscar. La película se ha erigido como una pequeña y deliciosa sorpresa, no sólo por el trabajo actoral que se podía presumir, sino por combinar tan inteligentemente momentos lacrimógenos con otros muy divertidos. Una película que se aleja puramente de lo que se concibe como cine festivalero pero que luego los asistentes tanto agradecen entre tanta densidad de autor ya que “Philomena” parece ser una película con un fin muy claro, emocionar y divertir al público. The Weinstein Company parece tener en sus manos uno de esos crowd pleaser que dan mucho juego a lo largo de la campaña. Es la cuarta película a concurso de Stephen Frears en Venecia tras “Liam” (2000), “Negocios ocultos” (2002) y “The Queen” (2006).
No ha tenido tanta suerte de convencer “Night moves” de Kelly Reichardt en la segunda participación de la directora en el festival veneciano tras “Meek´s cutoff” hace tres años. Una cinta sobre la radicalización del activismo medioambiental que tiene como protagonistas a Jesse Eisenberg, Dakota Fanning y Peter Sarsgaard. La cinta se centra tres jóvenes que viven en Oregón y que están muy concienciados con la situación del medioambiente. Eso les lleva a pasar a las acciones terroristas para defender sus ideas. Unos jóvenes idealistas pero egoístas que no son conscientes de los daños cometidos en una película que, no justificando los hechos, ha sido acusada de ser demasiado planfletaria por como la directora veladamente señala a petroleras o a organizaciones como el Banco Mundial como responsables de esta situación.
James Franco sigue con su recorrido festivalero tras participar este 2013 fuera de concurso en Sundance y Berlín con “Interior. Leather bar” y en Una cierta mirada de Cannes con “As I lay dying” adaptando a William Faulkner. Una incipiente pero ya febril carrera como director que pasa en esta ocasión por “Child of God” adaptando a Cormac McCarthy. Scott Haze interpreta a Lester Ballard, un hombre inadaptado y reprimido que es repudiado por todo su entorno y que se traslada a vivir a una cueva en las montañas en el Tennessee de los años 60. Un posible premio de interpretación masculina.
Nacho Gonzalo