La cazatalentos: Tom Hiddleston

Querido primo Teo:

Los actores británicos no pueden estar más en boga. Este caballero inglés tiene como seña de identidad unos rizos de oro y una sonrisa embaucadora. Inteligente, encantador, divertido, de porte aristocrático y dicción perfecta. Su físico y estilo lo llevan a repetir y destacar en las listas de los más deseados. Nació en Westminster en 1981 y es el segundo de tres hermanos. Su vena artística le viene de parte de madre, la cual fue directora de escena durante un tiempo. Se formó en el prestigioso instituto de Eton, semillero de políticos, diplomáticos y actores. En Cambridge se licenció en literatura inglesa, compartiendo desde entonces su amor por los clásicos con las tablas. Hizo un paréntesis en su carrera para finalizar sus estudios de arte dramático en la Academia Real. Su formación teatral le ha proporcionado, según él mismo reconoce, herramientas no sólo para su dominio de la escena, sino el físico y el método para abordar los diferentes personajes. Admirador confeso de Shakespeare ha representado con osadía varias de sus obras desde su época estudiantil. Está muy comprometido con las causas sociales, colabora con Unicef en su programa de protección a la infancia. No descarta en un futuro ponerse tras la cámara, poder contar historias propias, y mostrar su propio punto de vista del mundo a través del trabajo de los actores. Es amigo de Benedict Cumberbatch y Eddie Redmayne, y algunos de los actores que más admira son Daniel Day-Lewis, Al Pacino, Robert de Niro, Mark Ruffalo, Peter O'Toole, Anthony Hopkins, y Jeff Bridges. Te hablo de Tom Hiddleston, mucho más que el Loki de “Thor”.

Su debut en la pequeña pantalla fue en 2001 con un papel secundario en "La vida y aventuras de Nicholas Nickleby", la adaptación televisiva de la obra de Charles Dickens. Le seguirían “La solución final" y "Amenaza de tormenta" para la BBC. En 2005, tras el parón, se gradúa en arte dramático, y consigue su primer protagonista en la gran pantalla en “Unrelated” dando vida a un joven arrogante e insolente que pasa las vacaciones con sus padres y los amigos de estos en la Toscana. Se centra en su tensa relación con su progenitor y una posible relación con una mujer que le dobla la edad. Bajo la mirada personal de su directora, Joanna Hogg, repetiría después en “Archipelago”, en la que de nuevo una reunión familiar, antes de que el hijo mayor (Tom) se marche como voluntario a África, dejará entrever todas las fricciones escondidas.

En 2008 aparece en “Jane Austen recuerda” como el torpe y despistado pretendiente de la sobrina de la famosa escritora. Un año después, se hace con el papel de galán en la muy recomendable “Regreso a Cranford”, miniserie de la BBC basada en las novelas de Elizabeth Gaskell.

Se ha calzado las botas de Casio, personaje sobrado de talento y ambición, en “Otelo” en la cual compartía cartel en el West End junto a Ewan McGregor y Chiwetel Ejiofor. Puede presumir de tener un padrino de lujo, su carrera está muy vinculada como veremos a Sir Kenneth Branagh. Con él ha coincido en teatro, televisión y cine y le debe mucho, además del papel que le ha dado a conocer internacionalmente. Branagh coincidió con Hiddleston en la escena londinense en la adaptación del drama de Chekhov “Ivanov”, en la que representaba a Lvov, un médico sincero, fanático del orden e irritante. También en la serie “Wallander”, donde daba vida al detective Magnus Martinsson, comedido en su réplica, siempre a la sombra del veterano y legendario personaje de Henning Mankell, el absoluto protagonista. Tom trabajaba junto a Kenneth cuando se enteró de que sería el encargado de dirigir una adaptación de Thor. Ataviado como Lvov no se lo pensó dos veces y se presentó en el camerino de Branagh emulando al héroe de la Marvel.

A pesar de prepararse a conciencia para el papel, que incluía como obliga la tradición en estos casos a dieta y duro entrenamiento, el veterano actor y director creyó que era el más indicado para el papel de Loki, su carácter y su inteligencia le acercaban más al hermano díscolo. Y a la vista de los resultados no podemos más que darle la razón y las gracias. Según palabras del propio Tom el personaje de Loki no dista mucho de Edmund de “El rey Lear”: “Es envidioso y ambicioso a partes iguales, tramposo, impredecible, practica las artes oscuras, un personaje con aristas, vulnerable, y muy complejo psicológica y emocionalmente. Es el contrapunto perfecto del héroe, es delgado, flexible, rápido, y su principal anhelo es el amor y reconocimiento de su padre”.

El 2011 no fue un mal año, da el salto internacional y tiene el honor de trabajar nada menos que con Steven Spielberg y Woody Allen. En "Midnight in Paris", el mayor éxito de crítica y público del creador de “Annie Hall” de los últimos años, se viste el traje del escritor F. Scott Fitzgerald, compañero de juergas nocturnas de artistas como Ernest Hemingway, Salvador Dalí y Pablo Picasso en un onírico Paris de los años 20. En esta ocasión, el protagonista y alter-ego del propio Allen es Owen Wilson, un guionista insatisfecho con su presente en busca de la gloria literaria. Un día que no olvidará fácilmente, recibió la llamada con la que todo actor ha soñado alguna vez. Steven Spielberg quería conocerle y el encuentro no pudo ser más emocionante. Steven le pregunto si sabía montar y Hiddleston le reconoció que Vic Armstrong, el doble de Harrison Ford en las películas de Indiana Jones, era quién le había entrenado para varias escenas de “Thor”. Y así es como acabo la prueba de casting y se hizo con el papel del carismático Capitán Nicholls: “Si Vic te enseño a montar… me gustaría que trabajaras en esta película”. En "Caballo de batalla" Nicholls es un oficial de la caballería británica que compra a Joey, el caballo, prometiendo a su joven dueño cuidarlo y devolverlo, si fuera posible, cuando la guerra termine. Ese mismo año, bajo las ordenes de Terence Davies, protagoniza "The deep blue sea", adaptación de la obra de Terence Rattigan. Íntima y conmovedora historia sobre el amor no correspondido, el dolor y la soledad. Tom es Freddie un ex piloto de la RAF, marcado por la guerra, vital, superficial, egoísta, que se dedica a vivir, beber, jugar al golf y huir de responsabilidades. En una sociedad encorsetada por los convencionalismos, una espléndida Rachel Weisz atrapada en un matrimonio sin amor con un juez mayor (Simon Russell Beale), cae rendida bajo el encanto del joven piloto. Los tres personajes necesitan y buscan el amor, el cual conciben de formas muy diferentes.

Antes del éxito incontestable de “Los vengadores”, es elegido para encarnar al príncipe Hal en la serie "The hollow crown", basada en los retratos que el dramaturgo británico por excelencia les dedico a los reyes ingleses Ricardo II, Enrique IV y Enrique V. Acompaña en la misma a un reparto de primera línea: Ben Whishaw, Patrick Stewart, David Morrissey, Jeremy Irons, Michelle Dockery, Simon Russell Beale y Julie Walters, entre otros. Presenciamos un cambio de registro abismal de su personaje en el duro camino hacia su madurez. En la primera parte es un joven rebelde, travieso, inexperto, e irresponsable, y en la segunda se convierte en un auténtico guerrero, un poderoso monarca capaz con su palabra de arengar a las tropas antes de la batalla, el hombre que acepta al fin su responsabilidad y su destino, el hombre que su padre quería que fuera. Definitivamente, no todos los actores pueden recitar los enrevesados versos de William Shakespeare con esa cadencia y sentimiento.

Algunos privilegiados han podido ver en el último Festival de Sitges "Only lovers left alive", donde la película de vampiros del enigmático e independiente director Jim Jarmusch se hizo con el premio especial del Jurado. Hiddleston y la etérea Tilda Swinton son Adam y Eva, sofisticados y distinguidos, aunque se encuentren en peligro de extinción. Él es un hombre bohemio, deprimido, y con un look cercano al de una estrella de rock, y ella la única que le puede salvar. Muy alejada del imaginario tradicional asociado a los vampiros, es una historia esencialmente romántica a través del tiempo y el espacio.

En estos momentos se está preparando para un gran reto, el papel principal de la tragedia más sangrienta del dramaturgo por excelencia británico: “Coriolanus”, el héroe y defensor aclamado por el pueblo romano. Tom ha definido la historia como la guerra entre la integridad y la popularidad, la confrontación entre la acción militar y la política, el debate entre la responsabilidad pública y la libertad privada. No es arriesgado aventurar que será todo un acontecimiento.

Entre sus próximos estrenos encontramos “Exhibition”, su tercera colaboración, tras “Unrelated” y "Archipelago", con la directora Joanna Hogg, prometedora guionista y directora especialista en diseccionar las emociones y las relaciones familiares. Narra la relación de una pareja de artistas de mediana edad que decide vender la casa en la que han vivido los últimos veinte años y en la que Tom interpreta al agente inmobiliario. También, tiene una breve participación en la secuela de los Muppets, la que ha definido como “la experiencia más divertida de mi vida” y en la que le veremos demostrar sus dotes para la comedia. Esta no será la primera vez que comparte plano con un famoso teleñeco, hay constancia gráfica de un encuentro con Peggy en la entrega de los Bafta de 2012. Ha reemplazado a su amigo Benedict Cumberbatch, sólo después de obtener su bendición, en el próximo proyecto de terror de Guillermo del Toro, un romance gótico sobre una joven escritora que descubre que su joven y encantador marido no es quien parece ser.

Su nombre se asocia inevitablemente a la imagen de Loki y su carrera se desarrolla paralela a la de su personaje. Como por arte de magia, el pelo oscuro endurece sus rasgos dulces, se acentúa aún más su palidez, y Hiddleston se transforma en un malo atormentado de carne y hueso. Fue el escogido para enfrentarse solito al “dream team” de los superhéroes en "Los vengadores", y su éxito no ha hecho más que ratificarse dándole un papel más relevante en la secuela de "Thor". En ésta podremos ver cómo se profundiza en la relación con su hermano y se debate entre sus odio más profundo o la redención.

Cuando pisa un escenario se transforma. Este año ataviado como el auténtico príncipe de Asgard cautivó al público de la Comic-Con con un monologo improvisado. Comienzan a alzarse las primeras voces preguntándose ¿para cuándo una película en solitario? Ya están tardando.

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