"El hombre invisible"
La web oficial.
El argumento: Cecilia rehace su vida tras recibir la noticia de que su ex novio, un maltratador empedernido, ha fallecido. Sin embargo, su cordura comienza a tambalearse cuando empieza tener la certeza de que en realidad sigue vivo.
Conviene ver: "El hombre invisible" es una vuelta al clásico de H.G. Wells adaptándolo a los nuevos tiempos y con el tema del maltrato a las mujeres como gran amenaza ya que ahora es un ex novio acosador y maltratador congénito el que vuelve del más allá como presencia incorpórea para martirizar a su ex pareja. Una cinta intrigante, rodada con elegancia y que tiene en este giro su mayor baza no necesitando de monstruos para que esa realidad social, esa lacra todavía vigente en nuestro tiempo, sea lo más escalofriante posible como una perfecta analogía de esas mujeres que sufren malos tratos y que son incapaces de escapar de la sombra de sus abusadores, tanto por parte de ellas como de una sociedad que en demasiadas ocasiones no termina de entenderlas ni apoyarlas como debe. Una apuesta que juega con los espacios vacíos y la soledad aislada, con una casa de elegancia arquitectónica e inquietud malsana que es un personaje más, para asfixiar todavía más con una estupenda Elisabeth Moss como esa mujer vulnerable ante lo desconocido, aterrorizada ante la obsesión del amor más enfermizo más allá de la muerte y con la imaginación y los efectos de sonido como contexto atemorizante así como una cámara que pasa de voyeurista a acosadora en un viaje por los límites de la cordura. 123 años después se demuestra que a toda historia se le puede dar una vuelta hablando más en este caso del acoso de nuestros días que misterio científico de la invisibilidad, aquí bañado de fibra óptima visionaria respecto la icónica cinta de 1933 dirigida por James Whale y con el guiño al nombre de Griffin. Un thriller de terror que, aunque tira de un prólogo alargado, cae de pie por su propuesta estilizada, sus giros, escenas que se quedan en la retina y el remozado en una propuesta nada manida combinando tensión, suspense, sustos y denuncia. Una gran y original aportación al género llevando la esencia de la historia a un mundo de relaciones tóxicas, prejuicios a la hora de repartir culpabilidades y recursos tecnológicos.
Conviene saber: La cinta está dirigida y escrita por Leigh Whannell.
La crítica le da un SEIS