Conexión Oscar 2021: Película internacional
Querido Teo:
La segunda edición en la que la categoría llega con su nueva denominación de película internacional deja un quinteto más que notable a pesar de que el factor mediático se lo está llevando una película en concreto. "Otra ronda" es la clara favorita tanto por el recorrido de estos meses como por esa nominación a mejor director para Thomas Vinterberg. Eso le haría tener el Oscar casi en la mano pero este apartado, de vez en cuando, ha ofrecido sorpresas como el año en el que “Amélie” con 5 nominaciones y “El laberinto del fauno” con 6 nominaciones vieron como el premio cayó de otro lado. Estas son las finalistas tras las 93 películas que iniciaron el camino para hacerse con este Oscar.
“Otra ronda” (Dinamarca)
"Otra ronda" es la cinta europea del año. Thomas Vinterberg nos introduce en la historia de cuatro profesores, Martin (Mads Mikkelsen), Tommy (Thomas Bo Larsen), Peter (Lars Ranthe) y Nikolaj (Magnus Millang), que trabajan en el mismo colegio cada uno de ellos impartiendo una especialidad; Historia, Educación Física, Música y Psicología. Todos pasan de los 40 y tienen esa crisis de la mediana edad en la que hastiados en la rutina, y pensando que ya han vivido sus mejores años, se encuentran en un momento de decaimiento, algo que a raíz de una conversación les lleva a que el alcohol pase a ser un estímulo para mejorar tanto a nivel profesional como personal ya que uno de ellos les convence a todos de que hay una serie de estudios que demuestran que los grandes genios de la cultura, la política o la retórica no dudaban en regar su cuerpo con alcohol para potenciar sus habilidades cubriendo el déficit del cuerpo humano del 0,05% de alcohol en sangre que mantiene la teoría del psicólogo noruego Finn Skårderud. Algo con lo que pretenden emular la emoción creativa de Tchaikovsky, la inspiración de Hemingway o la retórica infalible de Churchill que mantenía sólo una excepción respecto al alcohol, no ingerirlo nunca antes del desayuno.
Thomas Vinterberg es de los pocos directores que ha conseguido dos nominaciones en esta década en la categoría de mejor película internacional compartiendo ese honor con el ruso Andréi Zvyagintsev, el iraní Asghar Farhadi y el polaco Pawel Pawlikowski. Fue con “La caza” en 2014 cuando ya se quedó cerca de ganar en el que fue uno de los mejores quintetos que se recuerda saliendo ganadora “La gran belleza”. Una sólida propuesta sobre un profesor acosado en una pequeña comunidad rural a través de los rumores, la intransigencia y un odio que se propaga como el fuego avivado por la gasolina contando ya con Mads Mikkelsen como principal reclamo. Ahora con “Otra ronda” Vinterberg ha terminado de asentarse como uno de los directores más imprescindibles, sólidos y certeros de nuestro tiempo como bien ha reconocido la Academia con esa nominación a la mejor dirección que encamina bien el que sería el cuarto Oscar para Dinamarca.
“Better days” (Hong Kong)
Hong Kong logra su tercera candidatura al Oscar con una cinta que ha ido creciendo y ganándose un hueco entre los finalistas dejando fuera a otras apuestas con mayor eco internacional. “Better days” se adentra en un drama como el bullying en una sociedad competitiva y que centra en un examen lo que será la vida futura de los estudiantes. Un drama social que deriva en thriller romántico a través de la historia de amor de dos jóvenes en un entorno que se siente asfixiante. Una propuesta que no pretende ser complaciente y que, aunque en algunos recursos estéticos pueda ser acusada de forzada y poco sutil, es un alegato de lo que pretende defender, la identidad del individuo frente al colectivo en una sociedad que pretende cortar a todos por el mismo patrón creando una sensación de fracaso para los que se quedan en el camino viéndose obligados a vivir como marginados o a acariciar la idea del suicidio.
“Better days” está dirigida por Derek Tsang y se ha convertido en una candidata atípica entre las nominadas de este año. Un melodrama lleno de intriga sobre la China contemporánea que mantiene la atención del espectador por su mezcla de géneros que hace conectar con su fondo más que sobre cualquier veleidad estética. La cinta se ha convertido en todo un éxito en su país recaudando más de 200 millones de dólares.
“Collective” (Rumanía)
Aunque parezca mentira Rumanía ha conseguido su primera nominación al Oscar en este apartado certificando el buen momento del cine rumano a nivel internacional, en este caso a través de un documental (al igual que la macedonia “Honeyland” el año pasado ha conseguido doblete en los Oscar) que en España se puede ver en HBO. “Collective” radiografía uno de los episodios más oscuros de la historia de Rumanía de la última década, el incendio en el Colectiv Club de Bucarest en el que murieron 65 jóvenes y decenas resultaron heridos, suceso que dejó al descubierto las cloacas del estado.
La propuesta de Alexander Nanau es un docudrama que se aprovecha de un montaje intenso para hablar de la corrupción de un país que deja al sistema sanitario en precario, ofreciendo un mensaje muy pertinente para unos tiempos en los que la pandemia ha demostrado que no hay nada más fundamental que la salud y su sustento con un sistema fuerte y comprometido. Un trabajo que se mueve como una intensa investigación por los agujeros del sistema ya que, tras lo ocurrido en esa sala de conciertos, se destapan las vergüenzas de un Estado que ha desmantelado lo más fundamental y que intenta tapar sus deficiencias a través de los medios de comunicación afines. Crítica social pero también un reflejo histórico de lo ocurrido en un país que parece dejado a su suerte por sus propios gobernantes. Pulso periodístico y conciencia social en uno de los trabajos más alabados del año.
“El hombre que vendió su piel” (Túnez)
Túnez consigue su primera nominación con “The man who sold his skin”, cinta de Kaouther Ben Hania. Sam Ali, un joven sensible e impulsivo de Siria, abandona su país poniendo rumbo hacia el Líbano huyendo de la guerra. Para poder viajar por Europa y vivir así con el amor de su vida, acepta tatuarse la espalda a manos de uno de los artistas contemporáneos más importantes que existen. Tras convertir su cuerpo en una prestigiosa obra de arte, Sam comprende poco a poco que su decisión implica todo lo contrario a lo que él deseaba en un principio: la libertad.
Una fábula que funciona como sátira del mundo del arte pero que en el fondo es una denuncia sobre la crisis de los refugiados y un alegato de la libertad sea de la forma que sea en un retrato sobre un entorno de conflictividad social y el papel de la cultura tanto como estímulo como marca de definición imposible de borrar ante la huella que deja no sólo en la piel sino en el alma de quién la vive y la siente. Aunque algunos han acusado a esta película de tosca, irregular y demasiado intrascendente encierra un mensaje sobre el mundo materialista que nos rodea que hace que se haya ganado la plaza este año en la categoría. Es la que parte con menos opciones pero ha permitido que Túnez se estrene en los Oscar y se confirme el talento de un Kaouther Ben Hania que nos sorprendió en la sección Una cierta mirada del Festival de Cannes 2017 con la asfixiante e impactante “Beauty and the dogs”.
“Quo vadis, Aida?” (Bosnia Herzegovina)
La directora Jasmila Žbanić (ganadora del Oso de Oro del Festival de Berlín por “Grbavica” en 2006) ofrece un retrato desolador que compitió en el Festival de Venecia 2020 y que nos lleva a la Guerra de los Balcanes en la década de los 90 y a la actuación de la ONU a través de los llamados Cascos Azules. En el verano de 1995 Aida es una profesora que en tiempos de conflicto está sirviendo como traductora para la ONU en la ciudad de Srebrenica, pueblo que es ocupado por el ejército serbio y que lleva a que cientos de personas pidan ser acogidos por los campos de la ONU agolpándose en las vallas pidiendo auxilio ante la posibilidad de ser exterminados. Una propuesta que, no por obvia y ocupando un posicionamiento claro, no deja de ser una cinta impactante, desoladora y con una intriga que te mantiene pegado a la pantalla. Una tragedia todavía demasiado cercana y que muchos han olvidado estando la película dedicada a las 8.372 hombres musulmanes que fueron asesinados y dejaron mujeres, niños, amigos y vecinos noqueados ante la magnitud de la tragedia.
Un trabajo sincero e impactante, directo y claro, que deja imágenes difíciles de olvidar frente a ese primer plano de rabia, fuerza y tremendo amor y sacrificio por los suyos de una esposa y madre, en un momento en el que más que pensar hay que reaccionar y en el que sólo importa salvar la piel mientras vemos como la directora explora en sutiles detalles otras historias como la un chico que se viste de mujer para salvar el pellejo, dos enamorados que se despiden sabiendo que no volverán a verse, o las lágrimas de impotencia de los que teniendo el mando de la situación no pueden hacer nada frente al fatal destino al que ese pueblo parece abocado. Dramas individuales para un genocidio, una de las mayores vergüenzas recientes de la política internacional sostenido en la actriz Jasna Đuričić, con una mirada llena de ferocidad y de dolor, está espléndida creando un personaje con gran fuerza que saca toda esa rabia de madre coraje insensibilizándose ante lo que le rodea con la determinación de, ante todo, poner a salvo a los suyos. Una película rotunda.
El dictamen
Ganará: “Otra ronda” (Dinamarca)
Alternativa: “Quo vadis, Aida?” (Bosnia Herzegovina)
Quiero que gane: “Quo vadis, Aida?” (Bosnia Herzegovina)
Echo de menos: “Gaza mon amour” (Palestina)
Nacho Gonzalo
Ganará: “Otra ronda” (Dinamarca)
Alternativa: “Quo vadis, Aida?” (Bosnia Herzegovina)
Quiero que gane: “Better Days?” (Hong Kong)
Echo de menos: “Entre nosotras” (Francia) y "Night of the Kings" (Costa de Marfil)