Conexión Oscar 2019: Director

Querido primo Teo:

Dos películas rodadas en lengua no inglesa, tres directores nacidos fuera de los Estados Unidos y solamente dos realizadores que representan al cine de Hollywood entre los candidatos al Oscar a la mejor dirección. Esos datos dicen bastante de cómo ha sido la cosecha del cine usamericano del 2018 y también del aperturismo de la Academia a la que no se le caen los anillos a la hora de reconocer a otras cinematografías, otras instituciones afines deberían tomarla como ejemplo a seguir. En unos días en los que Donald Trump ha declarado el estado de emergencia en los Estados Unidos para financiar la construcción del muro con la frontera con México y así frenar la “invasión” otro mexicano, Alfonso Cuarón y por segunda vez, es el principal aspirante para llevarse el Oscar a la mejor dirección por “Roma” que también es una de las rivales a batir en la categoría de mejor película.

Alfonso Cuarón (Roma)

“Roma” no tiene nada que ver con “Gravity” y ésta tampoco guarda ninguna relación con “Hijos de los hombres” que no se encuentra en el mismo universo de “Harry Potter y el prisionero de Azkaban” que tampoco emparenta con “Y tu mamá también” que no juega en la misma liga de “Grandes esperanzas” ni tiene ningún parecido con “La princesita” y desde luego que tampoco con “Sólo con tu pareja”. Lo único que une a estas películas es la firma del mexicano Alfonso Cuarón que a sus 57 años puede presumir de ser uno de los mejores cineastas en activo porque tiene la capacidad de salirse continuamente de su zona de confort y siempre acertar, de él no se puede decir que tenga una película mala, ni siquiera regular, la mediocridad no va con él. Ya tiene 2 Oscars por “Gravity” en las categorías de dirección y montaje y este año es el plusmarquista de esta edición ya que con “Roma” aspira a la estatuilla por su labor como productor (y de manera doble ya que está en película y film en lengua no inglesa), director, guionista y director de fotografía. Se quedó fuera como montador.

“Roma” es un regreso al México que le vio crecer y a la mujer que estuvo trabajando para su familia desde que él era un recién nacido. Cuarón actúa como si fuera un voyeur al observar a Cleo (inspirada en su tata, Libo) porque a la clase sirviente, a pesar de la convivencia bajo el mismo techo, se la ve como algo lejano, perteneciente a otro mundo. La película rodada en un precioso blanco y negro, y con imágenes realmente portentosas que si me pongo a enumerar agotaría caracteres, es una mirada al pasado nostálgica pero crítica y también es un canto a la sororidad, a la solidaridad entre mujeres que aunque no pertenezcan a la misma clase comparten tragedias personales similares. No tiene rivales para alzarse con el que será su segundo Oscar como director porque desde que la película se presentó en el pasado Festival de Venecia se lo ha llevado absolutamente todo.

Yorgos Lanthimos (La favorita)

El griego Yorgos Lanthimos fue candidato al Oscar a la mejor película en lengua no inglesa por “Canino” y al mejor guión original por “Langosta”. Debutó en Hollywood en el 2017 con la reivindicable “El sacrificio de un ciervo sagrado” pero ha sido con su primer proyecto de encargo “La favorita” cuando a los 45 años ha logrado su primera nominación al Oscar como mejor director.

“La favorita” es una inmersión en la corte de la reina Ana de Gran Bretaña, una monarca inestable en todos los sentidos, arrastraba muchas enfermedades y tragedias personales que la convirtieron en un títere fácil, aunque ella también supo aprovecharse de esa condición. Y a pesar de que Lanthimos no es el autor del guión no renuncia a su estilo corrosivo para enseñarnos lo peor de la condición humana y firma su trabajo más accesible, también es verdad que ha despertado tanta admiración como rechazo, en mi mente quedará que fue la única que la disfrutó cuando la vi en el cine y que cuando salí el resto de espectadores estaban maldiciendo al cineasta. En “La favorita” se dan de la mano la ambición, el instinto de supervivencia y algo de lo que el director griego no ha dejado de hablar en sus películas, la soledad. Lanthimos hace un trabajo de dirección impecable y ha sido uno de los directores más venerados por la crítica durante el 2018 pero no puede hacerle sombra a Cuarón.

Spike Lee (Infiltrado en el KKKlan)

Hollywood, la crítica y el público daban a Spike Lee por muerto. En el 2013 se estampó con el remake usamericano de la venerada “Old boy” y el que había sido su último largometraje “Chi-Raq”, una puesta al día de “Lisístrata”, se estrenó mayoritariamente en el mercado doméstico. En el 2016 la Academia le reconoció con uno de sus premios honoríficos y el año pasado el director vivió su resurrección con “Infiltrado en el KKKlan” que fue galardonada con el Gran Premio del Jurado del Festival de Cannes y que ha sido una de esas películas que desde el momento de su estreno que fue en verano nadie quiso descartar como aspirante a los Oscar, primero porque funcionó muy bien y segundo porque a pesar de que se desarrolla durante la década de los 70 es una bofetada con la mano abierta a la América supremacista aplaudida por el presidente Donald Trump. A sus 61 años ha conseguido su primera candidatura al Oscar a la mejor dirección, sí que lo había sido como guionista por “Haz lo que debas” y por el documental “Cuatro chicas” y en esta edición también es candidato como productor y guionista de “Infiltrado en el KKKlan”.

“Infiltrado en el KKKlan” se basa en la historia de Ron Stallworth, un agente de policía afroamericano de Colorado Springs que se infiltró con la ayuda de un compañero judío que se hizo pasar por él en una organización local del KKKlan durante la década de los setenta. El film es sumamente entretenido, tiene ecos del "blaxploitation" de los 70 y Lee no es nada sutil a la hora de denunciar el racismo imperante en los Estados Unidos, que no ha cambiado absolutamente nada en estas décadas solamente hay que recordar lo sucedido en Charlottesville en el verano de 2017. “Infiltrado en el KKKlan” ha sido la resurrección de Spike Lee, temporal o definitiva eso ya se verá, ha estado presente en todos los premios de la temporada y es un buen momento para reconocer o mejor dicho para aplaudir el mensaje transmitido por el director así que es la única alternativa posible al triunfo de Cuarón.

Adam McKay (El vicio del poder)

Adam McKay ya estuvo nominado al Oscar por “La gran apuesta” por la que ganó la estatuilla al mejor guión adaptado. Por “El vicio del poder” regresa a los premios de la Academia. McKay de 50 años y curtido como guionista en el emblemático “Saturday Night Live” está viviendo un inmejorable momento en su carrera y, a pesar de que “El vicio del poder” no ha tenido la acogida de su anterior película, sí que ha sido una de las que más beneficiadas en el reparto de candidaturas así que a los académicos sí que les ha gustado.

“El vicio del poder” es una aproximación a Dick Cheney, una figura realmente hermética, que pasó de la clase obrera de Wyoming a ser el hombre más poderoso del mundo cuando fue el vicepresidente del gobierno de los Estados Unidos durante la administración de George W. Bush. Tal y como hizo en “La gran apuesta” McKay juega con la narrativa (rompe la cuarta pared o mete un epílogo a mitad de la película) y no es nada sutil ya que abusa muchísimo de los subrayados, también es cierto que se mueve dentro de la sátira. Sería una sorpresa verle como hipotética alternativa.

Pawel Pawlikowski (Cold war)

El director polaco de 61 años Pawel Pawlikowski se llevó el Oscar a la mejor película en lengua no inglesa en el año 2015 por “Ida” y por “Cold war” ha logrado nuevamente la nominación en dicho apartado y tambíen la proeza de meterse entre los cinco finalistas al Oscar a la mejor dirección. Su nombre estaba cada vez más presente entre las apuestas de los especialistas porque la acogida que ha tenido su última película ha sido magnífica empezando con el premio a la mejor dirección en el Festival de Cannes y el dominio en los galardones del cine europeo (EFA).

“Cold war” es una historia de amor que se desarrolla a lo largo de dos décadas vivida por un músico y una cantante totalmente incompatibles y a los que solamente les une el deseo y las ansias de libertad. Pawlikowski solamente necesita 88 minutos para hacer el recorrido, haciendo un uso magistral de la elipsis, no le hace falta más para hacer un retrato de esta convulsa relación a ritmo de la música tradicional polaca y del jazz y también de un país asolado por el comunismo. Es una alegría que “Cold war”, uno de los títulos más hermosos del 2018, haya sido reconocido con 3 candidaturas al Oscar, la tercera es para su bellísima fotografía en blanco y negro que ya ha sido reconocida por el Gremio, y ya con eso Pawlikowski puede considerarse premiado.

El dictamen

Ganará: Alfonso Cuarón (Roma)
Alternativa: Spike Lee (Infiltrados en el KKKlan)
Quiero que gane: Alfonso Cuarón (Roma)
Echo de menos: Bradley Cooper (Ha nacido una estrella)

Mary Carmen Rodríguez