Conexión Oscar 2018: Actriz de reparto
Querido primo Teo:
Una mujer de hierro cuya vida es la empresa familiar, una psicópata que ve en su hija una posibilidad de escape para huir de la miseria, una madre exigente que solamente busca lo mejor para su pequeña, una campesina que no ha dejado de sufrir las consecuencias del racismo y la cómplice que todos deseamos encontrar. Estos son los cinco personajes de las intérpretes que aspiran al Oscar a la mejor actriz de reparto y después de las últimas victorias de Viola Davis (“Fences”) y Alicia Vikander (“La chica danesa”) vemos que son verdaderas secundarias las que compiten. A pesar de que los premios de la crítica han ido en su mayoría a Laurie Metcalf (“Lady Bird”), la verdadera favorita a la estatuilla es Allison Janney (“Yo, Tonya”) y lo es desde que el film se presentó en el pasado Festival de Toronto. Y a pesar de encontrarnos con trabajos tan admirables como el de la propia Metcalf o el de Lesley Manville para “El hilo invisible”, lo cierto es que poco han podido hacer para eclipsar a una candidata a la victoria tan incontestable.
Mary J. Blige (Mudbound)
Ha sido una de las candidatas que han gozado de una de las campañas más potentes de la temporada por ser una estrella del mundo de la música con inquietudes interpretativas que asume su primer gran papel dramático en el cine y porque se encuentra en un film que habla sin tapujos de las consecuencias del racismo.
Mary J. Blige llega a los Oscar por su trabajo en “Mudound” por partida doble, ya que como compositora también aspira a la estatuilla a la mejor canción por Mighty river. En el film de Dee Rees (aclamado en Sundance y que se ha convertido en la mejor apuesta en estos premios de Netflix hasta la fecha) interpreta a Florence Jackson, la matriarca de una familia negra de Mississippi cuyo hijo parte al frente durante la Segunda Guerra Mundial y que tiene que vivir diariamente con el odio de sus vecinos muchos de ellos ayudados por ella o por los suyos. Blige se inspiró en algunas de las mujeres de su entorno más cercano que trabajaron en los campos y criando a niños de familias blancas. Su papel está resuelto con eficacia, especialmente cuando ve los efectos de la intolerancia del lugar, pero no dejamos de tener la impresión de que la nominación le ha llegado por la fuerza de su campaña más que por lo meritorio de su actuación.
Allison Janney (Yo, Tonya)
Allison Janney ha estado esperando a que llegara este momento y nosotros también. Gracias a su trabajo en la emblemática “El ala oeste de la Casa Blanca” se convirtió en una de las actrices más respetadas del mundo de la televisión y ese estatus no ha hecho más que crecer con el paso de los años, actualmente la Janney es una institución con unas piernas kilométricas porque tiene la cualidad innata de mejorar aquello en lo que participa y no hay género que se le resista. Pero a nivel cinematográfico, a pesar de haber participado en títulos como “American beauty”, “Las horas”, “Juno” o “Criadas y señoras”, nunca ha gozado de ese papel que le permita sacar al animal interpretativo que lleva dentro.
Y ese trabajo en la gran pantalla que necesitaba le ha llegado con unas pelucas espantosas y unas gafas de culo de botella, y es que además el personaje de LaVona Harding es una joya que está a la altura de su nombre. Es una mujer dominante, perteneciente al estrato más bajo de la sociedad, que ve en su hija que tiene aptitudes para el patinaje la solución a su miserable vida y para ella no existen los límites. LaVona Harding es una villana de manual de cualquier telenovela barata y además es graciosa y se nota que Allison Janney ha disfrutado en todo momento. Por personaje, por interpretación y por la trayectoria de una actriz que siempre ha demostrado su eficacia incluso en los papeles menos relevantes es la dueña del Oscar a la mejor actriz de reparto.
Lesley Manville (El hilo invisible)
Su candidatura al Bafta ya confirmó las sospechas de que Lesley Manville era una aspirante a tener en cuenta en esta categoría a pesar de no haber estado presente en las otras citas de la carrera, también es verdad que “El hilo invisible” de Paul Thomas Anderson fue de las últimas películas en ser vistas. La actriz británica curtida en el teatro y vinculada a la obra de Mike Leigh fue muy bien valorada por la crítica por su trabajo en “Another year” pero, a pesar de haberse llevado algunos premios, no logró el impulso suficiente para garantizar una candidatura.
En “El hilo invisible” interpreta a Cyril Woodcock, la hermana y mano derecha del protagonista encarnado por Daniel Day-Lewis. Cyril es una mujer que ha encomendado su vida a la Casa Woodcock que dirige con mano férrea y a Reynolds para quien actúa como si fuera su perro guardián: es su madre, su terapeuta y la persona a encargada resolver sus problemas con las mujeres. Manville, que bien podría ser una perfecta señora Danvers, está espectacular en el film de Paul Thomas Anderson pero es más una presencia implacable que una secundaria robaescenas y desgraciadamente eso juega en su contra ante aspirantes tan fuertes como Allison Janney y Laurie Metcalf.
Laurie Metcalf (Lady Bird)
Laurie Metcalf ha sido la única que ha podido hacerle sombra a Allison Janney ya que por su interpretación en “Lady Bird” ha sido quien ha dominado los premios de la crítica llevándose incluso los reconocimientos de las asociaciones más prestigiosas (le ha sucedido lo mismo que a Willem Dafoe en la categoría masculina) pero en los galardones más mediáticos, entre ellos el SAG que ha sido concedido por la industria, ha tenido que ceder ante una rival que se ha dado como favorita a la victoria desde el inicio de la temporada.
En “Lady Bird” interpreta a Marion, la madre de la protagonista. Aunque la relación que vemos en el film de Greta Gerwig no llega a ese extremo de toxicidad de “Yo, Tonya” sí que es conflictiva ya que a pesar de que las dos se quieren no se entienden; Lady Bird es una adolescente con delirios de grandeza que ha idealizado una vida que no es la suya y su madre lo único que quiere es lo mejor para ella y evitar que se pegue un porrazo cuando se caiga del guindo, es la única que se opone a que se vaya a estudiar al Nueva York inmediatamente después de los ataques del 11-S y es realmente el motor de esa familia cuya situación es complicada después del despido del padre. Metcalf está estupenda en un papel que, a nivel cinematográfico, le ha permitido demostrar todo ese potencial que le ha convertido en una figura indiscutible tanto en el teatro como en la televisión.
Octavia Spencer (La forma del agua)
Octavia Spencer es la única que ya sabe lo que es ganar un Oscar, lo consiguió en el 2012 poro “Criadas y señoras” y el año pasado volvió a ocupar una plaza por “Figuras ocultas”. Desde que se diera a conocer a nivel cinematográfico con su interpretación de la deslenguada Minny Jackson, la artífice del pastel de chocolate más famoso del mundo, la Spencer se ha convertido en una de las presencias indispensables en el cine estadounidense demostrando su eficacia en cualquier género.
En el film de Guillermo del Toro, “La forma del agua”, interpreta a Zelda, la compañera de trabajo en el laboratorio de Elisa. Actúa como su traductora en el lenguaje de signos y es su confidente y cómplice en ese mundo que acaba siendo hostil. No se puede decir nada malo de la interpretación de Spencer aunque ya la hayamos visto en papeles similares, la actriz está sencillamente perfecta en un personaje que ha sido confeccionado a su medida.
El dictamen
Ganará: Allison Janney (Yo, Tonya)
Alternativa: Laurie Metcalf (Lady Bird)
Quiero que gane: Allison Janney (Yo, Tonya)
Echo de menos: Holly Hunter (La gran enfermedad del amor)
Mary Carmen Rodríguez
Con todo claro en está categoría y ya a la espera de que finalmente Allison Janney se suba al teatro Dolby a recibir su estatuilla, sólo queda por decir que:
Ganará: Allison Janney por "I, Tonya"
Podría ganar: Laurie Metcalf por "Lady Bird"
Debería ganar: Allison Janney por "I, Tonya"
Debería estar nominada: Holly Hunter por "The Big Sick" (superior a dos de las nominadas de este año y no hablo de Lesley Manville ya que su nominación es de las más merecidas).
Sorpresa a ganar: Lesley Manville por "Phantom Thread"