Conexión Oscar 2017: Actor de reparto

Querido Teo:

La categoría de mejor actor de reparto ha ido ganando emoción conforme pasaban los días. De la incertidumbre de la que ya hablamos en su momento ha salido como resultado un quinteto digno y competitivo en el que no ha estado el que, erróneamente, se consideró favorito al principio de la carrera como era Liam Neeson que ha vivido en propias carnes el derrumbe de las opciones de “Silencio”. Mahershala Ali por “Moonlight” es el favorito aunque sólo sea por haber ganado el SAG, pero perder el Globo de Oro y el Bafta (además del nivel que hay en la categoría) provoca que pueda saltar la sorpresa.

Actor de reparto

Los candidatos

Mahershala Ali (Moonlight)

El Oscar no haría más que cimentar la gran progresión que está teniendo este actor que parece encaminado a ser una de las estrellas afroamericanas de los próximos años. A sus 43 años sólo este año ya se le ha visto en su papel recurrente en las series “House of cards” (por el que ya ha sido candidato al Emmy) y “Luke Cage", además de en las películas “Los hombres libres de Jones”, “Figuras ocultas” y “Moonlight”. Su papel de Juan en la película de Barry Jenkins es de los que se quedan en la retina del espectador como ese camello que se redime acogiendo bajo sus alas al joven protagonista y que, en cierta manera, será la referencia paternal que ayudará a construir la personalidad del personaje. El trabajo de Mahershala en la película se valora especialmente cuando él no está, dejando cierta sensación de que hubiera gustado saber algo más de él más allá del primer acto. Y es que Ali demuestra ser un actor con presencia pero que también inunda de naturalidad y humanidad un personaje que es el clásico mentor negro, que tan bien funciona en este apartado, pero que resuelve con suma eficacia. El SAG y ser la manera de premiar en representación a un gran reparto de intérpretes (del que sólo él y Naomie Harris han conseguido candidatura) son las mayores bazas del actor para hacerse con el Oscar.

Jeff Bridges (Comanchería)

Jeff Bridges es el veterano de la categoría sumando su séptima candidatura al Oscar, premio que sólo materializó como actor protagonista en 2010 por “Corazón rebelde”. Los años han dado a Bridges cierto aire venerable representando a ese ciudadano de la América profunda asqueado de todo y que farfulla y gruñe más que habla. Rescatando un papel como el de Tommy Lee Jones en “No es país para viejos”, Bridges da vida a un sheriff a pocas fechas de la jubilación que persigue a la pareja de hermanos ladrones formada por Chris Pine y Ben Foster, al que finalmente Bridges ha terminado eclipsando a pesar de que también hubiera merecido la candidatura. El actor termina siendo un alivio cómico casi encabezando una particular “buddy movie” con su compañero de andanzas pero también luciéndose en algún momento de especial intensidad dramática. El problema para Bridges, además del Oscar relativamente reciente y ser el único de la categoría ya premiado, es que da la impresión que el personaje al que da vida está tan interiorizado en él que parece que lo resuelva con el piloto automático casi confundiéndose al intérprete con el personaje. Tampoco ha ganado ningún premio relevante en la carrera incluso habiéndose dejado Mahershala Ali algunos galardones en el camino.

Lucas Hedges (Manchester frente al mar)

Desde la proyección de la película en el Festival de Telluride ya se habló maravillas del trabajo en la cinta de Lucas Hedges, un joven de 20 años que termina siendo la revelación de la película de Kenneth Lonergan como ese chico en esos años de transición entre adolescente y joven adulto en los que, además del desconcierto habitual, esto se ve acrecentado tras la pérdida de su padre y la llegada de un tío con el que ha ido perdiendo el contacto con los años y que ha recibido el encargo de ser su tutor legal. Es muy difícil no empatizar con este joven que termina refrescando la película por esa mezcla de determinación y vulnerabilidad y en la que, dentro de ese egoísmo hedonista propio de la juventud, quiere que su vida se vea lo menos alterada posible continuando con el hockey, su grupo de música y flirteando con dos chicas sin llegar a mayores con ellas a su pesar. Todo un soplo de aire fresco para una interpretación tan emotiva como divertida que Hedges resuelve con una profunda naturalidad y honestidad formando un gran tándem con Casey Affleck y, a su vez, retroalimentando y elevando la interpretación de éste en sus choques, réplicas e intentos de acercamiento. Su premio es la nominación en una carrera todavía embrionaria en la que ya le habíamos visto en cintas como “Moonrise kingdom”, “El Gran Hotel Budapest”, “The zero theorem” o “Matar al mensajero”. La nominación es un trampolín que sólo esperamos que sepa aprovechar.

Dev Patel (Lion)

Casi una década después del fenómeno de “Slumdog Millionaire”, Dev Patel ha conseguido la nominación al Oscar que se le escapó en aquella ocasión. El actor británico de origen hindú, que parecía abocado a caer en el olvido entre cintas con referencias a bailoteos de Bollywood o ser el pesado insoportable en repartos con viejas glorias inglesas, se ha revelado ahora como el veinteañero Saroo de “Lion” que es el vehículo emocional de la cinta de Garth Davis. Un joven adaptado a la vida de Australia, y querido por su familia adoptante, que, sin embargo, siente esa “llamada de la sangre” emprendiendo el objetivo de volver a reencontrarse con su familia en la India. Aunque durante parte de la carrera se valoraron sus opciones como protagonista, The Weinstein Company amarró la nominación promocionándole como actor de reparto aprovechándose del hecho de que (aunque de vida al personaje protagonista) es el niño Sunny Pawar el que lo interpreta en la primera hora de película. Quizás esa preponderancia durante la cinta, y que sea el papel más empático y emotivo de todos, le da más opciones de las que todos piensan aunque sólo ha ganado el Bafta y da la impresión de que en ese caso le benefició jugar en casa. No obstante, el triunfo de Patel ha sido con esta película callar muchas bocas que tenían de él como actor una imagen muy distinta a la que ahora ha demostrado.

Michael Shannon (Animales nocturnos)

Es la segunda nominación para Michael Shannon confirmando que es un “salvapatrias”. Tras ser el único actor nominado en “Revolutionary Road” en la edición de 2009, ahora repite candidatura en el mismo apartado siendo la única nominación conseguida por “Animales nocturnos”, segundo largometraje de Tom Ford que fue mucho mejor tratado en los Globos de Oro y en los Bafta. Shannon consigue la nominación, además de por su buen trabajo en la cinta como ese detective tan colaborador como esquivo y vulnerable, por un estatus que se ha ido ganando con el paso de los años como actor de raza y que eleva cualquier reparto. Tras quedarse a las puertas de la candidatura el año pasado por “99 homes” (siendo nominado en todos los premios importantes), en esta ocasión ha seguido el camino inverso optando a la candidatura a pesar de que su compañero de reparto Aaron Taylor-Johnson fue el que sorprendentemente ganó el Globo de Oro y también optó al Bafta. El prestigio que ha ido cosechando con el paso de los años, y ser un personaje robaescenas en una película que hubiera merecido más presencia, le convierte para nosotros en la más seria alternativa a poder dar la sorpresa en este apartado. Nadie vería mal un Oscar para un actor como Michael Shannon.

El dictamen

Ganará: Mahershala Ali (Moonlight)
Alternativa: Michael Shannon (Animales nocturnos)
Quiero que gane: Michael Shannon (Animales nocturnos)
Echo de menos: Simon Helberg (Florence Foster Jenkins)

Nacho Gonzalo