Conexión Oscar 2016: Paul Dano, la confirmación de un talento

Querido Teo:

En las tempraneras predicciones primaverales "Love & mercy" fue una de las películas que más estaba presente en las mismas. El problema es que sus buenas críticas, y las gozosas sensaciones que dejó este recorrido musical y vital de Brian Wilson en dos actos, provocaron que muchos confundieran, como suele ser habitual en la carrera, sus deseos con la realidad. En verdad la fecha de estreno tan temprana no fue más que una losa, convirtiéndola en un mero aperitivo con el que entretenerse antes de que llegaran los grandes títulos del año que corrían el riesgo de borrarla del mapa. Parece que así ha sido aunque el equipo de la cinta se resiste a ello y hace unos días nos encontrábamos al director Bill Pohlad y a los actores Paul Dano y Elizabeth Banks en un evento para periodistas y académicos con Brian Wilson (líder de The Beach Boys) como protagonista. Dano, que lo interpreta en la película en su juventud y en su década más exitosa (los 60), se animó a salir al escenario y a cantar, una de las habilidades que tuvo que potenciar en la película junto la de aprender a tocar el piano. Uno de esos momentos tan espontáneos como perfectamente calculados para mantener en el candelero a una película que deberá ser rescatada por las Asociaciones de Críticos para seguir en la conversación.

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Aunque inicialmente la estrategia de la modesta Roadside Attractions (que ha tenido en cartera en los últimos años “Mud”, “Joe”, “El hombre más buscado”, “71”, “The homesman”, “Mommy”, “Mr. Holmes” o la desaparecida “The sea of trees”) era postular a Paul Dano como actor protagonista, al ser destacado como lo mejor de la película, finalmente se ha optado por promocionarlo en la categoría de actor de reparto, apartado natural si tenemos en cuenta que ha sido su estatus habitual en el cine de Hollywood y que, además, se reparte el protagonismo de la cinta con John Cusack que interpreta a Wilson a partir de la década de los 80. Aunque también Elizabeth Banks fue muy bien valorada por su trabajo, las escasísimas opciones que tiene la película de estar presente en la carrera al Oscar es en el apartado de actor de reparto en el que Dano ya se viene mereciendo una candidatura a la estatuilla, ofreciendo aquí uno de esos trabajos complejos que van desde la pasión musical hasta la ingenuidad más enternecedora, no cayendo en la sobreactuación propia de un personaje con problemas mentales, y para el que ha ganado 15 kilos.

Paul Dano tiene 31 años y no nos duelen prendas en afirmar que posiblemente sea el mejor actor usamericano de su generación. Todavía no ha saltado a las grandes ligas de reconocimientos y premios (es cuestión de tiempo) pero ha logrado pasar de los obvios papeles indies de "nerd", a los que su físico parecía arrástrarlo, construyendo una carrera inteligente, inquieta y con papeles complejos sólo capaces de levantar por los dotados para la actuación con mayúsculas.

En 2001 sorprendía con “L.I.E.” como un quinceañero que lo perdía todo tras la muerte de su madre en un entorno peligroso y deshumanizado, acabando relacionándose con un hombre mayor que él, un vecino al que pretende robar su casa. Ganó el Independent Spirit al mejor debut actoral y apareció brevemente en “The emperor´s club” (2002), “La vecina de al lado” (2004) y “Vidas ajenas” (2004). Eso no era nada para lo que estaba por llegar ya que en 2006 todos le conoceríamos como el adolescente introvertido que hace voto de silencio en "Pequeña Miss Sunshine" en un reparto en estado de gracia ganador del SAG. En "Pozos de ambición" (2007) era el joven reverendo que se pasaba de frenada (seguramente contagiado por la habitual sobreactuación de Daniel Day-Lewis) optando a un Bafta. Después aparecería en la iniciática "Destino: Woodstock" (2009), se reencontraría con Brian Cox tras “L.I.E.” en "Un buen corazón" (2009) y pondría voz a uno de los monstruos de “Donde viven los monstruos” (2009). Tras estar en títulos ajenos a su talento y puramente comerciales (“Noche y día”, “Cowboys & aliens”) abrazó el indie en 2012 siendo un joven inadaptado en “For Ellen”, reencontrándose con su padre tras una relación rota en “La vida de Flynn” y siendo un escritor en crisis creativa en la genuina "Ruby Sparks", coincidiendo con Zoe Kazan (su pareja) en su ideal de musa y mujer.

A partir de ahí no ha fallado en todas sus elecciones abonándose al papel de robaescenas como en "Looper" (2012), una de las cintas más aclamadas recientemente en el género de ciencia ficción, dando vida a un deficiente apaleado sobre el que cae toda la rabia y equivocado sentido de venganza de un dolido padre en "Prisioneros" (2013), así como el envidioso capataz esclavista de "12 años de esclavitud" (2013).

Esta temporada no ha hecho más que confirmar este talento in crescendo. No sólo en la comentada “Love & mercy”, cumpliendo con sobresaliente en el biopic musical, sino en la italiana "La juventud" en la que, a pesar de contar con un reparto de leyendas como Michael Caine, Harvey Keitel y Jane Fonda, destaca sobremanera como un actor de método con aspecto hippy que se prepara metódicamente para dar vida a un controvertido personaje histórico. Una vez más, Dano demuestra en estos dos papeles su inconformismo y como, de manera metódica y con aparente facilidad, es capaz de hacerse con cualquier personaje.

Todo parece indicar que este tampoco será el año en el que consiga su primera candidatura pero sería una estupenda sorpresa verlo en "foto finish" colándose en el quinteto. Aun así sólo es cuestión de tiempo que Paul Dano, que ya ha pasado hace varias películas de la condición de promesa a la de confirmado, sea reconocido como uno de los grandes valores actorales del cine americano actual, algo que Hollywood necesita precisamente en unos años en el que todos los nuevos valores al alza vienen del Reino Unido. Afortunadamente seguro que esto no es más que el principio de una carrera llena de personajes para el recuerdo.

Nacho Gonzalo