Conexión Oscar 2016: Actor de reparto
Querido Teo:
La categoría de mejor actor de reparto llega como la más emocionante desde el punto de vista interpretativo. Aunque la mayoría de como favorito a Sylvester Stallone, esta mezcla de nostalgia y comeback no le asegura el premio teniendo en cuenta su ausencia en el SAG y que se podría confundir la persona con el personaje como ya ocurrió en casos como los de Lauren Bacall, Bill Murray o Mickey Rourke que finalmente se quedaron sin premio siendo como eran tan favoritos. Da la impresión de que, como en la carrera de 2013, cualquiera de los cinco contendientes podría alzarse con la victoria a pesar de que algunos quieran cerrar la competición entre Sly y Mark Rylance.
Actor de reparto
Los candidatos
Christian Bale (La gran apuesta)
A sus 42 años Christian Bale aspira a su segundo Oscar tras la estatuilla conseguida en este mismo apartado en 2011 por “The fighter” y la candidatura como protagonista cosechada en 2014 por “La gran estafa americana”. Las opciones de Christian Bale han ido creciendo día a día como seria alternativa en el caso de que finalmente Sylvester Stallone doble la rodilla y Mark Rylance pierda el favor de la crítica que ha tenido en las principales asociaciones de premios. Bale es uno de esos actores, de la estirpe de Daniel Day-Lewis o Joaquin Phoenix, que parecen destinados a todo por cualquier papel, transformándose en lo que haga falta y cumpliendo el paradigma de “actor de método”. Tras sorprender como el crío de “El imperio del sol” en 1987 y pasear como galán indomable, sus dos grandes hitos interpretativos fueron el bróker gore amante del látex de “American psycho” (2000) y el escuálido protagonista de “El maquinista” (2004). Abrazó el cine comercial más denso siendo el Batman de Nolan, David O. Russell le puso en la órbita de los premios y ha rodado con gente tan dispar como Todd Haynes, Terrence Malick, Zhang Yimou o Ridley Scott. En “La gran apuesta” es el singular Michael Burry, un tipo lleno de tics que vaticinó desde su oficina el derrumbe del mercado de las hipotecas. Teniendo en cuenta el síndrome de Asperger que tiene el protagonista, así como ese solo de batería digno de “Whiplash”, Bale da lustre interpretativo (junto a Steve Carell) a la película y eso le valdría para convertirse en la opción preferida.
Tom Hardy (El renacido)
Tom Hardy es el octavo actor que logra la nominación en este apartado trabajando en una película con Leonardo DiCaprio. Los dos se conocieron en “Origen” (2010), momento de lanzadera para un actor que sorprendió en “Bronson” (2008), y a partir de ahí la carrera de Hardy no ha hecho más que crecer con títulos como “El caballero oscuro: La leyenda renace”, “Locke”, “La entrega (The drop)”, “Warrior”, “Legend” o “Mad Max: Furia en la carretera”. Precisamente estar en dos de las películas más fuertes del año puede beneficiarle en cierta manera, logrando ser de lo mejor de la película de Iñarritu (que es al único personaje que se permite dibujar un poco junto al del protagonista). Tom Hardy es John Fitzgerald, un ser mezquino que es el desencadenante de esa travesía en la aridez más inhóspita de un DiCaprio con sed de venganza. Se anima a adoptar un papel muy arquetípico del western, el villano sin escrúpulos al que el protagonista busca hasta llegar a una escena final memorable. El hándicap de Hardy es principalmente que los Oscar han sido los únicos premios que le han tenido en cuenta; aunque nadie vería mal un premio por una interpretación que funciona en el rol de soporte y que trabajó a conciencia tanto en el acento como a la hora de pulir el aspecto más rudimentario del personaje.
Mark Ruffalo (Spotlight)
Mark Ruffalo se ha ido convirtiendo en uno de los fijos de las candidaturas con su tercera nominación en este apartado tras las de “Los chicos están bien” en 2011 y “Foxcatcher”. Ruffalo ha logrado pasar del anonimato del cine indie a ser popular gracias a Marvel y demostrarse como un actor más allá del eficiente tipo normal y anodino al que parecía abocado. Tres candidaturas por tres personajes a los que llena de humanidad con una facilidad pasmosa; tanto en su intento de sentar la cabeza encontrando una nueva familia, defender el prestigio deportivo de su hermano o intentando destapar la verdad; siendo el componente más vehemente de ese grupo de periodistas que forma “Spotlight”. Ruffalo trabajó mucho los tics y modos de expresión del personaje lo que le convierte en la estrella de la función en un reparto eminentemente coral y poco dado al lucimiento. Lo mejor para Ruffalo es que está en el momento justo de una carrera en la que se combina su inteligencia como actor, su profesionalidad, el ser reclamado por todo tipo de películas y no generar ningún conflicto en Hollywood. Quizás es el que menos convence en su interpretación respecto a sus compañeros nominados pero "Spotlight” podría sacar botín de esta categoría ante la incertidumbre de la noche, sobre todo en el caso de que haya sorpresa y ese cariño que cada vez más va ganando Ruffalo se materialice en Oscar.
Mark Rylance (El puente de los espías)
Mark Rylance y su estoicismo se convierten en carne de premio en “El puente de los espías” para todo galardón que se precie, especialmente en tierras inglesas donde es institución, pero los Oscar tienen sus propias reglas y este descubrimiento tardío de Spielberg al cine USA (junto a su participación en la serie “Wolf Hall”) le convertían en el máximo favorito al premio hasta la irrupción de Stallone. Rylance no necesita de grandes gestos ni abandonar su rostro de payaso tristón para con poco hacer lo destinado a los grandes. Cada frase, réplica o leve gesto sirve para ir conociendo al personaje y también el cambio de paradigmas de los que le rodean en la época más tensa de las relaciones entre el capitalismo y el comunismo. El británico también estudió a conciencia al espía ruso Rudolf Abel y, como ya hiciera Barkhad Abdi hace dos años, logra ser el amo del escenario cuando comparte escenas con Tom Hanks. La colaboración entre Spielberg y Rylance (el director lo descubrió en una representación en Londres de “Noche de reyes”) parecía condenada a producirse teniendo en cuenta que iba a contarse con él para “El imperio del sol” pero, una vez más, su pasión teatral (hábitat natural) pudo más haciendo uno de sus pocos escarceos con el cine en “Intimidad”, algo que parece que va a ser menos habitual a partir de ahora ya que también es el gigante de la próxima de Spielberg, “Mi amigo el gigante”, y en “Dunkirk” de Christopher Nolan. Una interpretación merecedora de premio a la que le perjudica su excesiva sobriedad y la nula presencia que ha tenido Mark Rylance haciendo campaña lo que no le ha permitido ganar notoriedad en este concurso de simpatías que son también los Oscar.
Sylvester Stallone (Creed)
Sylvester Stallone es el sexto actor en conseguir dos nominaciones por un mismo personaje. Le precedieron Bing Crosby (“Siguiendo mi camino”, “Las campanas de Santa María”), Paul Newman (“El buscavidas”, “El color del dinero”), Peter O´Toole (“Becket”, “El león en invierno”), Al Pacino (“El padrino”, “El padrino II”) y Cate Blanchett (“Elizabeth”, “Elizabeth: La edad de oro”). Como ya hicieron esta temporada “Mad Max” y “Star Wars” se ha hecho con “Creed” una puesta a punto del personaje y su iconografía, obra del empeño de Stallone y cariño que siempre ha tenido al personaje creado tras el mítico enfrentamiento entre Muhammad Ali y George Foreman, repitiendo el esquema de la primera película pero actualizándolo a los tiempos actuales y con ese mentor (Han Solo en la saga galáctica y el viejo zorro Rocky en esta, una sombra de lo que fue pero reconvertido en entrenador) como apoyo en la sombra calzándose Sylvester Stallone los zapatos de lo que supuso para él el personaje de Burgess Meredith. Stallone interpreta un icono al que ha brindado un brillante epílogo, tras la notable teórica despedida que le brindó en “Rocky Balboa”, tirando de humanidad, componente emocional, tanto dramático como nostálgico, y cimentando un estatus de estrella (más que de actor) que quiere hacer valer para volver a subir a la lona a por el Oscar que se le negó como actor y como guionista cuando fue nominado hace 39 años perdiendo ambos premios en favor de “Network, un mundo implacable”.
El dictamen
La apuesta: Christian Bale (La gran apuesta)
La alternativa: Sylvester Stallone (Creed)
Quiero que gane: Tom Hardy (El renacido)
Echo de menos: Paul Dano (Love & mercy)
Nacho Gonzalo
Mejor Actor de Reparto:
La apuesta: Christian Bale (La gran apuesta)
La alternativa: Sylvester Stallone (Creed)
Quiero que gane: Christian Bale (La gran apuesta)
Sorpresa a Ganar:Tom Hardy (El renacido)
Echo de menos: Jacob Tremblay (Room)
Esta categoría es la mas abierta de todas, porque cualquiera puede sorprender ganando:
Christian Bale es el que cumple con una actuación mas que asombrosa y con un cambio de registro como nos tiene acostumbrado, cuenta con el apoyo de una Academia bastante mimada con el actor y tiene la pinta de coronar con su segundo Oscar en Mejor Actor de Reparto- como Christoph Waltz.
A lo mejor me equivoco pero no veo a la academia tan considerada y abierta a premiar a un Sylvester Stallone por Creed, definitivamente no veo y no creo que Stallone lo merezca, pero si Catherine Zeta Jones tiene un Oscar porque no Stallone.
Mark Rylance es una opción bastante fuerte por El puente de los espías y tiene las misma opciones de los anteriores mencionado cuenta con un Bafta como respaldo. no tiene para nada descartadas sus opciones para llevarse el Oscar, y hay que tener en cuenta que fue uno de los favoritos antes de que apareciese Bale y Stallone.
Ruffalo y Hardy son comodines que en caso de ganar nadie pondría en duda su Oscar, Hardy tiene a su favor el famoseo y favoritismo de El renacido y Ruffalo el estar nominado por tercera vez en la misma categoria y dos de ellas consecutivas, y cuanta con la ausencia de galardones que podria obtendrá Spotlight (Mejor guion original y Película si fuese el caso) Ruffalo puede ser el aliciente de estatuilla para la película, una Lupita Nyong'o de 12 años de esclavitud.
Pero la opción mas evidente a ganar es Bale.
Stallone por estas simples razones:
La Academia difícilmente tendrá la oportunidad de reconocerlo nuevamente por una actuación.
Si hablamos en números, la figura de Rocky es una leyenda que a pesar de tener más criticas malas que favorables, las recaudaciones de la saga en la industria han sido buenas gracias precisamente a ese popular personaje.
Factor sentimental. Basta con recordar la ovación que le hacen los demás actores en la entrega de los globo de oro.
Finalmente y espero no equivocarme, en caso de que gane, tengo la impresión que Stallone no va a perder la oportunidad de agradecer a la comunidad afroamericana por el trabajo realizado en conjunto.
Pero si Idris Elba o Jacob Tremblay estuvieran en la terna seguro la historia sería muy diferente.
Apoyo que hay ausencias muy importantes en esta categoria como Jacob Tremblay o Idris Elba.
Pero sin lugar a duda pienso que la academia no suele ser tan considerada con actores como Stallone, espero equivocarme pero eso no quiere decir que así lo desee, no veo a los académicos premiando a Stallone.
Pues yo si veo ganando a Stallone y su momento se ha venido construyendo, donde ha estado, ha ganado y ni los SAG ni BAFTA han dado un claro rival. Y si lo gana sería un Oscar muy merecido, el resto de los nominados no me despierta interés por la falta que me hacen Idris Elba y Jacob Tremblay.
Es completamente imposible que gane Bale. Puedo entender que al autor del artículo le haya gustado (de hecho, también es mi preferido), pero esto es una web de predicciones, no de gustos personales, y la realidad es que ponerlo como favorito es un capricho claro del autor.
Yo a Paul Dano lo echo de menos, en todo caso, en actor principal (es el personaje que más aparece en pantalla en Love & Mercy). Aquí a quien echo de menos es a Idris Elba.
Y al final ganó el más inesperado. Es cierto que su papel está muy bien en la película, aún siendo muy muy secundario. No viene mal una sorpresa de vez en cuando aunque no me pareció que su papel fuera tanto como para un Óscar. Aunque este año en general el nivel no ha sido para echar cohetes, salvo El Renacido. Incluso Spotlight, la ganadora, me pareció una buena película, pero no para un óscar nada menos que a la mejor película.