Conexión Oscar 2012: Actriz

Querido Teo:

Toca comentar la que posiblemente sea la categoría interpretativa más emocionante de esta edición de los Oscar. Después de que la categoría de mejor actriz haya experimentando varios cambios de tendencia a lo largo de estos meses, Viola Davis y Meryl Streep llegan muy igualadas de cara a hacerse con el Oscar a la mejor actriz. Por su parte, aunque llegue algo más rezagada, Michelle Williams ha sido la favorita de la crítica por su encarnación de Marilyn Monroe en “Mi semana con Marilyn”. Glenn Close vuelve a los Oscar 23 años después y seguirá siendo la actriz viva sin Oscar con más nominaciones mientras que Rooney Mara cubrió la cuota dedicada a las promesas del cine por su encarnación de Lisbeth Salander en la última película de David Fincher.

Glenn Close (Albert Nobbs)

Tiene 64 años y es su sexta nominación al Oscar. Ha sido candidata como actriz de reparto por "El mundo según Garp" en 1983, "Reencuentro" en 1984 y "El mejor" en 1985 y como actriz protagonista por "Atracción fatal" en 1988 y "Las amistades peligrosas" en 1989. El runrún en el comienzo de la temporada apuntaba hacia ella como una de esas deudas históricas que la Academia tiene pendiente de saldar. Finalmente, el poco éxito crítico de la película y la demasiado hierática interpretación de Close, han lastrado todas sus opciones. Glenn Close empata con Deborah Kerr con 6 nominaciones como la actriz sin Oscar con más candidaturas. Close ha levantado este proyecto de manera muy personal después de que representara el texto sobre las tablas en 1982. Tras varios años intentando llevarlo al cine, la actriz confío en Rodrigo Garcia (el director que más alegrías le ha dado en el cine en los últimos años con películas como “Cosas que diría con sólo mirarla” y “Nueve vidas) para que se encargara de la puesta en escena de un proyecto que, aún así, ha conseguido 3 nominaciones al Oscar (actriz, actriz de reparto y maquillaje). La Academia le ha vuelto a abrir las puertas pero se quedará otra vez sentada en el patio de butacas. Sin duda, cuando Close tendría que haber ganado el Oscar fue en su época dorada en el cine, los 80.

Viola Davis (Criadas y señoras)

Tiene 46 años y es su segunda nominación al Oscar. Fue candidata como actriz de reparto por "La duda" en 2009. Desde que la viéramos en “La duda” hace tres años, Viola Davis ha saltado al primer plano de la actualidad de los premios después de curtirse como una secundaria eficiente y anónima. Cuando Meryl Streep recibió el premio por “La duda” en el Gremio de Actores, la actriz gritó a los cuatro vientos que dieran un papel protagonista a Viola después de su portentosa interpretación de escasos minutos en la película de John Patrick Shanley. Quien le iba a decir a la veterana actriz que quizás ese proyecto que le iban a dar le iba a costar su tercer Oscar. Viola Davis llega con dos premios importantes en su haber (el Critics´ Choice y el Gremio de Actores) que la colocan en la mejor posición para hacerse con la estatuilla. Más todavía si tenemos en cuenta la calurosa ovación (llena de lágrimas emotivas entre sus compañeras de reparto) que recibió cuando ganó el Gremio de Actores. El personaje de Viola Davis representa el dolor interno de todas esas mujeres negras que han servido durante generaciones a las clases más altas de la sociedad usamericana. Criadas que casi no podían hablar ante sus señoras, y que tenían que sufrir esa discriminación que tanto ha tardado en superarse. Viola Davis lo dice todo con la mirada en ese sufrimiento interno que se mueve entre la minusvaloración y el dolor de la pérdida. “Criadas y señoras” es una película de actrices y, al margen de su cuestionable calidad, ha sabido conectar con la idiosincrasia de todo un país, siendo Viola Davis su mascarón de proa como la criada Aibileen. Viola Davis ya se quedó muy cerca del Oscar con “La duda” (premio que ganó Penélope Cruz), y la sensación de que puede ser la gran oportunidad de premiar a un tipo de actriz que por su color de piel no puede acceder al gran repertorio de papeles de las actrices de su generación, jugará mucho a su favor. Más todavía si contamos con ese factor histórico que le gusta a la Academia. Viola Davis sería la segunda actriz negra en ganar el Oscar de actriz protagonista tras Halle Berry en 2002. Incluso parece tener el beneplácito de Meryl Streep. “Viola, you´re mi girl” le dijo cuando recibió el Globo de Oro el mes pasado. Hay otro dato que favorece a Viola Davis y es que 27 de las 41 últimas ganadoras del Oscar en esta categoría contaban también con su cinta nominada a mejor película del año. Es la única de las candidatas que tiene esa suerte.

Rooney Mara (Millennium: Los hombres que no amaban a las mujeres)

Tiene 26 años y es su primera nominación al Oscar. Mara finalmente terminó colándose en el quinteto de nominadas a pesar de que no fue candidata al Gremio de Actores (si al Globo de Oro). Su encarnación de Lisbeth Salander en lo nuevo de Fincher ha sido el vehículo por el cual la actriz consigue una candidatura que no pudo lograr Noomi Rapace por la versión sueca. Mara se hizo con el papel por delante de todas las actrices jóvenes de Hollywood que fueron testadas para hacerse con uno de los papeles más deseados. Finalmente, Fincher confío en Mara tras haber trabajado con ella en “La red social” donde interpretaba a la ex novia de Mark Zuckerberg. Mara recibe el mejor bautismo posible para seguir una carrera que habrá que ver como evoluciona. La candidatura la consiguió en el último momento ante el empuje de “Millennium: Los hombres que no amaban a las mujeres” en los Gremios y por delante de otras opciones que se quedaron sin nominación como Tilda Swinton por “Tenemos que hablar de Kevin” o Elizabeth Olsen por “Martha Marcy May Marlene”.

Meryl Streep (La dama de hierro)

Tiene 62 años y es su 17º nominación al Oscar. Ha optado al Oscar en la categorí­a de mejor actriz por "La mujer del teniente francés" (1982), "Silkwood" (1984), "Memorias de África" (1986), "Tallo de hierro" (1988), "Un grito en la oscuridad" (1989), "Postales desde el filo" (1991), Los puentes de Madison" (1996), "Cosas que importan" (1999), "Música del corazón" (2000), "El diablo viste de Prada" (2007), "La duda" (2009) y "Julie y Julia" y ganó el Oscar por "La decisión de Sophie" en el año 1983. En el apartado de actriz de reparto ha optado por "El cazador" (1979), "Adaptation (El ladrón de orquídeas)" (2003) y lo ganó por "Kramer contra Kramer" en el año 1980.

Que podemos decir a estas alturas de la gran Meryl Streep. Una mujer que sigue ampliando su leyenda con su record de candidaturas en los Oscar. El problema es que lleva 29 años sin ganar la estatuilla. Demasiado tiempo para una grande de Hollywood destinada a codearse con los registros de Katharine Hepburn (4 Oscar) e Ingrid Bergman (3 Oscar). Todos los años en los que está nominada nos hacemos la misma pregunta. ¿Será este año el de su tan ansiado tercer Oscar?. Sin duda, su papel en “La dama de hierro” es carne de estatuilla mimetizándose con Margaret Thatcher de una manera que asusta. Además, los Weinstein están detrás aupando las opciones de Meryl Streep. En los últimos años siempre ha habido una actriz que se ha puesto por delante de las posibilidades que podría tener Streep (hubiera ganado por “La duda” si hubiera colado la estrategia de la distribuidora de poner a Kate Winslet como secundaria por “The reader” y no como protagonista) y también se quedó muy cerca por “El diablo viste de Prada” (ganó Helen Mirren) y por “Julie y Julia” (el año de Sandra Bullock). El problema en su caso es que parece que la Academia está reservándose al momento en que Meryl Streep merezca la estatuilla por una gran película para así rendirle tributo con todos los honores. Su principal hándicap es las nefastas críticas para “La dama de hierro”, calificada de telefilm barato y demasiado condescendiente con una figura tan polémica como la Thatcher. Nadie duda que Meryl Streep está colosal en la película pero la cinta no está a su altura y es una de las grandes decepciones del año. Por otro lado, mal dato para Meryl Streep de cara a ganar su tercer Oscar. En los últimos 16 años, Helen Mirren es la única actriz mayor de 50 años que ha ganado el Oscar a la mejor actriz protagonista. Meryl Streep ha perdido cinco veces frente actrices más jóvenes, Julie Christie perdió frente a Helen Hunt en 1998 y Marion Cotillard en 2008, Judi Dench cayó frente a Helen Hunt en 1998 y Reese Witherspoon en 2006. También Ellen Burstyn frente a Julia Roberts en 2001 o Annette Bening frente a Natalie Portman en 2011. Los Oscar las prefieren jovenes. Aún así el sentimiento y las ganas de premiar a Meryl (siempre chispeante en sus discursos de agradecimiento) sobrevuela en el ambiente desde hace mucho tiempo y el Globo de Oro y el Bafta son estupendas credenciales que pueden anunciar que este año si le toca aunque llega igualadísima en la recta final con su amiga Viola Davis.

Michelle Williams (Mi semana con Marilyn)

Tiene 31 años y es su tercera nominación al Oscar. Candidata como actriz de reparto por "Brokeback Mountain" en 2006 y como actriz protagonista por "Blue Valentine" en 2011. Llega también avalada por los Weinstein y es la segunda actriz más joven (sólo por detrás de Kate Winslet) en conseguir tres nominaciones al Oscar. Williams cumple el perfil de ganadora de los Oscar de los últimos años. Joven y, a pesar de ello, con cierta experiencia, encarnando además a un personaje real. Williams sale airosa del reto de interpretar a todo un icono de la cultura popular como Marilyn Monroe. Encanto, dulzura, sensualidad, picaresca y soledad son las asignaturas que Williams saca con nota para interpretar a un personaje con tantas aristas como el de Marilyn. La actriz ha convencido a los críticos (siendo la que más premios ha ganado este año entre las distintas asociaciones) pero su candidatura se ha desinflado en las últimas fechas ante la encarnizada disputa de Viola Davis y Meryl Streep por el Oscar. Aún así, los Oscar podrían reconocer su evolución desde que sorprendiera a más de uno por su papel en “Brokeback Mountain” que le valió su primera nominación. Al igual que Carey Mulligan, es una de esas actrices que aúnan dulzura, inocencia y misterio y que sorprenden con sus interpretaciones película a película. Michelle Williams podría ser la segunda en ganar el Oscar por interpretar a una actriz real después de Cate Blanchett por “El aviador” en 2005 encarnando a la Hepburn. Aunque no parece que vaya a conseguirlo, sigue en la carrera y podría dar la sorpresa de última hora.

El dictamen

La apuesta: Viola Davis (Criadas y señoras)
La alternativa: Meryl Streep (La dama de hierro)

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Nacho Gonzalo (Coronado)