Conexión Oscar 2010: Director

Querido Teo:

La categoría de mejor dirección llega con dos titulares muy golosos para la prensa que sigue superficialmente la carrera de los Oscar. Un matrimonio, ya roto, pelea por el Oscar, así como Kathryn Bigelow puede ser la primera mujer en conseguir el Oscar en dirección en 82 años de Historia. No ha habido mucha más oportunidad en una película claramente masculina, pero no machista y es que salvo el caso de Barbra Streisand las mujeres que alguna vez han tenido posibilidad real de nominación han terminado consiguiendo la candidatura. El problema es que con tan pocas mujeres directoras, algo que está cambiando y que este año se ha demostrado, es complicado llegar con opciones a esa categoría. Lina Wertmüller, Jane Campion y Sofía Coppola son los anteriores ilustres precedentes. Las tres consiguieron además la candidatura a mejor guión original y las dos últimas se hicieron con él. Ahora, por primera vez, los Oscar pueden marcarse el tanto de ver a una mujer con el premio a la mejor dirección del año. Más allá del hecho histórico, la verdad es que no puede ser más merecido un galardón que corresponde a Bigelow por la fuerza, estilo y nervio con la que lleva a cabo la realización de “En tierra hostil”, una película que no habría llegado aquí sin esa potente dirección y ese ejemplar montaje, dos Oscar que tiene asegurados el próximo domingo.

Los candidatos

Kathryn Bigelow (En tierra hostil)

Tiene 58 años y es su primera nominación al Oscar como mejor director sumada a la conseguida por la producción de “En tierra hostil”. Una mujer nunca etiquetada en un género concreto. Y es que muchos en la industria consideran que ser mujer implica dirigir un tipo específico de películas que van entre el drama y la comedia con el apelativo de romántico siempre por ahí pululando. Bigelow es la única directora que se nos ocurre, junto a alguna propia del cine de acción como Mimi Leder, que aborda una temática puramente masculina o, mejor dicho, un estilo propio independientemente de su género. Y es que viendo una película de Bigelow nunca se puede decir que esa cinta esté dirigida por una mujer. 30 años de una carrera irregular que ahora lleva a su momento álgido. Bigelow parecía que iba a ser una prometedora pintora cuando a finales de los 70 empezó a trabajar en algunos cortos. Su primer gran éxito, todavía película de culto, fue “Le llaman Bodhi” con Patrick Swayze y Keanu Reeves. Una carrera de pocos títulos entre los que destacan “Días extraños”, su trabajo mejor valorado hasta la fecha, la floja “El peso del agua” y la político-bélica “K-19”, aquella sobre un submarino soviético que protagonizaba Harrison Ford. Una directora de estilo propio, con un gran sentido de la acción, y con un grupo reducido de fans que ahora ha aumentado notablemente. Precisamente fue gracias a James Cameron por el que se interesó en “En tierra hostil”. La realizadora tenía la intención de adaptar el libro de Eric Larson “The devil in the white city”, pero Cameron leyó el guión de “En tierra hostil” y le dijo que se decantara por ese proyecto. La película lleva un largo recorrido desde que se presentara en el Festival de Venecia de 2010, y aunque en recaudación no llegó a los 15 millones de dólares, su éxito crítico le ha empujado a una privilegiada posición. Con el reciente apoyo del Gremio de Directores, Bigelow está preparada para hacer Historia.

James Cameron (Avatar)

Tiene 55 años y es su sexta nominación al Oscar. Ganó 3 estatuillas como productor, director y montador de “Titanic” (1998). Este año es candidato en los mismos apartados por “Avatar”. 12 años después de que se autoproclamara rey del mundo con "Titanic", el carácter megalómano de Cameron no tiene suficiente con esa victoria y con “Avatar” no sólo pretende llevarse el Oscar sino también marcar un antes y un después. La influencia de “Avatar” en el cine sólo lo dirá el tiempo pero lo que ya es una realidad es que “Avatar” es el gran éxito de este año. Cuando una película pasa a tener la dimensión de acontecimiento no puede evitar tener división de críticas, como así ha sido el caso, pero “Avatar” es la apuesta puramente industrial que ha llenado de dólares las arcas hollywoodienses. Ese es un gran argumento para Cameron pero también es verdad que su carácter y la famosa frase “soy el rey del mundo” sigue levantando ciertas ampollas en distintos sectores. El mérito de James Cameron es su perseverancia en un proyecto que le ha costado 15 años en realizar y en el intento de innovación en un sector al que siempre le ha costado evolucionar. El carácter perfeccionista, y casi dictatorial, de Cameron ha levantado una película que carece de un guión sólido pero que es todo un alarde visual captando el 95% de las expresiones de los actores y transportándolas a sus respectivas réplicas digitales. Su ex mujer le lleva la delantera, y Cameron parece contento que así sea al estar más interesado en el premio gordo, pero el premio de James Cameron es que las dos películas más taquilleras de la Historia del cine sean suyas. ¿Ya ha desbancado Cameron a Spielberg como Rey Midas de Hollywood?.

Lee Daniels (Precious)

Tiene 50 años y consigue dos nominaciones como productor y director de “Precious”. Apoyado en el voto afroamericano es el segundo negro en optar al Oscar de director después de John Singleton por “Los chicos del barrio”. Algo también muy significativo. Con su propia productora albergó cintas independientes que tuvieron cierto eco crítico como “Monster´s ball”, Oscar para Halle Berry, y “El leñador” con Kevin Bacon. Saltó a la dirección con “Shadowboxer” y en su segunda película salta del anonimato a los focos de Hollywood. Todo tras la adaptación de la obra “Push” en la que Daniels hace gala de un estilo telefilmero que le da una imagen sucia y sórdida. Quizás para reflejar la angustia que vive la protagonista como paralelismo a la propia relación que vivió él con su padre, un oficial de policía que le maltrataba al nunca entender porque su hijo era homosexual. En todo caso, la dirección de “Precious” es uno de los puntos débiles de la película consiguiendo la nominación por un mero efecto arrastre.

Jason Reitman (Up in the air)

Tiene 32 años y alcanza la cuarta nominación al Oscar. Nominado como mejor director por “Juno” (2008), por “Up in the air” es candidato como productor, director y guionista. Es el director más joven en conseguir dos nominaciones. Dos candidaturas por tres películas le elevan a la altura de futuro prometedor en proyecto de maestro. Los admiradores de “Up in the air” comparan su dirección con la de nombres como Billy Wilder o Alexander Payne. Esto todavía le viene grande a Reitman pero la verdad es que se ha convertido en el niño mimado de la crítica con sus tres películas. “Gracias por fumar”, “Juno” y “Up in the air” le convierten en un talento en ciernes. Siempre alejado de los intentos de rodar comedias descerebradas o de culto, para algo es hijo del director “Los cazafantasmas” o “Poli de guardería”, Reitman es un especialista en ese género incipiente como es el de la dramedia. Crear películas con estilo amable pero que por dentro encierran un profundo dolor y vacío en los personajes. En “Up in the air” reflexiona sobre el amor, la vida en pareja, la despersonalización de las empresas y un mundo sin valores. Grandes temas que nos afectan a todos y que en “Up in the air” se presentan de la mejor manera. Quizás sea uno de los títulos que más perdure de esta temporada de Oscar, pero todavía no ha llegado el momento de Reitman. En todo caso, esta película le convertirá en un hombre oscarizado gracias a la estatuilla de mejor guión adaptado. Si sigue así seguro que el de director llegará algún día...

Quentin Tarantino (Malditos bastardos)

Tiene 46 años y es su cuarta nominación al Oscar. Ganó el Oscar al mejor guión original por “Pulp Fiction” (1995) siendo nominado como mejor director por esa misma película. “Malditos bastardos” le ha permitido repetir candidatura en esas dos categorías. De enfant terrible a uno de los maestros modernos respetados del cine USA. La Academia tenía ganas de volver a nominarlo pero con cintas como “Kill Bill” o “Death Proof” no ha tenido oportunidad para ello. Ya lo dice Brad Pitt al final de “Malditos bastardos”. Quizás Tarantino, a su manera, haya creado su particular obra maestra. Todo ello en términos de cinta redonda porque “Pulp Fiction” seguirá siendo su película inmortal y de culto. Con “Malditos bastardos” pega una patada a la historia mezclando géneros y guiños cinéfilos saliendo victorioso del intento. Tarantino es uno de los directores mejor valorados de la actualidad y a más de uno le gustaría verlo con un Oscar pero no tiene nada que hacer ante el duelo entre Bigelow y Cameron. Con “Malditos bastardos” ha vuelto a la senda de los premios hollywoodienses y, quizás, pronto reciba su recompensa. Con “Malditos bastardos” se queda cerca de ello aunque, hay que decir, que antes ganaría “Malditos bastardos” el premio de mejor película que el de mejor dirección. Así que si el de película puede parecer complicado el de realizador se nos antoja imposible.

El dictamen

Kathryn Bigelow ganará un Oscar merecido e histórico. La dirección de “En tierra hostil” es intachable y la Academia tiene la oportunidad de marcarse un gran titular a su favor. Algunos pueden dudar de que “En tierra hostil” gane al final el Oscar, pero el signo de Kathryn Bigelow tiene que estar bien marcado en la quiniela.

La apuesta: Kathryn Bigelow (En tierra hostil)

La alternativa: James Cameron (Avatar)

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Nacho Gonzalo (Coronado)