Cine en serie: Series para el Apocalipsis

Querido Teo:

Vaya por delante que no comparto la paranoia de moda, que es la de los mayas y el final de su dichoso calendario. Pero si fuese cuestión de ponerse en plan agorero, y realmente el día 21 toca Armagedón (¿qué se pone uno para una ocasión así, formal o sport?), al menos nos podemos ir preparando para cuando llegue el momento y veamos caer los rascacielos, mientras nos cogemos de la mano y nos decimos eso de “me has conocido en un momento extraño de mi vida”.

Pues eso, al lío. Que conste que aquí el baremo de calidad es variable (y en algunos casos tirando a bajo), pero todas nos pueden dar una idea de qué podemos esperar del fin del mundo, cada una a su manera:

- The walking dead: El sueño de más de un friki, en caso de que la advertencia de los mayas se refiriese a un Apocalipsis zombi (que no de infectados, que ya veo venir a más de uno), lo suyo es conseguir un buen machete, un revólver (pistola no porque es más difícil de mantener, you know) y una buena ración de plomo. Imprescindible localizar y ocupar la prisión más cercana y, sobre todo, no fiarse de nadie que se haga llamar el Gobernador, el Rey o el Presidente de la Escalera.

- Revolution: Aquí la estrategia es similar, pero nada de prisiones. Mejor pasar completamente desapercibido en alguna aldea cultivando patatas y, sobre todo, no cabrear a las milicias, que tienen poco sentido del humor. Si a pesar de todo uno se pone flamenco y decide desafiar al régimen establecido, algunos factores clave para la supervivencia en este escenario son ser una chica mona, pero un poco insufrible, o un informático con algo de sobrepeso y graciosete.

- Jericho: Esta serie es poco conocida por algo, y es que los guionistas se esforzaron mucho por hacerla fracasar. Aquí el tema es sobrevivir a una guerra nuclear en un pueblecito americano que, curiosamente, no se ha visto afectado por la radiación ni la lluvia ácida. Le sumamos pandillas de salteadores de caminos a lo Mad Max, unas guerrillas para darle sabor, y de postre una conspiración para explicar el ataque. En este caso sobrevive el más descerebrado, cuánto más gorda la líe uno más probabilidades tiene de salir con vida.

- Terra Nova: ¿A quién no le gustaría vivir en Parque Jurásico?. Pues a mí. Al principio todo muy divertido y muy exótico, sí, pero eso de “saca a pasear al velociráptor que hoy no ha salido, y no te olvides de ponerle el bozal” se iba a hacer cansino rápido. Por no hablar de lo de tener que llevarse la bolsita para recoger lo que suelte el bicho en la acera… La clave para sobrevivir en este universo es ir a misa todos los domingos y ser muy pero que muy bueno (ya lo decía Bill Murray: “¡Sed buenos, por el amor de Dios!”).

- Enano Rojo: Confieso que esta serie no la he visto más que a trozos, y es una pena porque es uno de esos clásicos de culto que habría que tachar de la lista de pendientes (y además tiene temporada nueva). Aquí más que de supervivencia se trata de sobreponerse al aburrimiento mortal de compartir un espacio cerrado con la misma gente durante tantos y tantos años. Si al final resulta que el mundo no se acaba aprovecharé el parón navideño y le daré la atención que merece.

En resumen, conviene hacer acopio de provisiones (no perecederas, por favor, que no me venga nadie con un palé de queso fresco porque se lo haré comer allí mismo) y de armas, a ser posible cortantes o que no necesiten munición para funcionar, que a fabricar flechas cualquiera puede aprender pero a fundir metal para hacer balas ya no. Y mientras tanto, batamanta, sofá y a repasar el material de estudio, que nunca se sabe cuándo puede hacer falta.

P.D.: Como bonus track, un vídeo con uno de esos temas que tienen que estar sí o sí en un recopilatorio de canciones para el fin del mundo. Pe-li-cu-lón.

Vídeo

Atentamente.
Profesor Falken