Cannes 2014: Solidaridad laboral de los Dardenne, ciclo vital por Naomi Kawase, sensibilidad romántica de Zhang Yimou y Ryan Gosling en su debut como director

Querido Teo:

Sólo siete directores han sido capaces de ganar en dos ocasiones la Palma de Oro y uno de ellos son la pareja de hermanos formada por los belgas Jean-Pierre y Luc Dardenne. Tras ganar por “Rosetta” en 1999 y “El niño” en 2005, demuestran que su cine encandila a los diversos jurados del certamen ya que siempre han salido con premio Por “El hijo” se llevaron en 2002 premio del Jurado, en 2008 con “El silencio de Lorna” toco el mejor guión y en 2011 con “El niño de la bicicleta” se llevaron el Gran Premio del Jurado. ¿Serán capaces de ganar una tercera Palma de Oro? Lo que está claro es que se meten en el grupo de favoritos, una vez más, ya que “Deux jours, une nuit” es una de las películas que más ha gustado, tanto por su certero, profundo y capriano mensaje sobre la crisis que nos asola, como por tener en la cinta a una espléndida Marion Cotillard.

Cotillard interpreta a una mujer que se enfrenta a la pérdida de su empleo. La única manera de conservarlo es que sus compañeros renuncien al sobresueldo anual que tienen fijado por contrato; teniendo para ello una semana para trazar un plan e intentar convencerles. Un potente drama social sobre la solidaridad laboral y la lacra del desempleo en el que los hermanos parecen acercarse más al cine de Ken Loach que al que habitualmente han tratado ellos en dramas más austeros, sórdidos y marginales. Ese convencionalismo también ha tenido sus críticas y para algunas voces los Dardenne han tirado en esta ocasión por lo obvio ofreciendo un trabajo menor, pero todo depende de gustos ya que para otros los hermanos han perfeccionado su técnica llevando a cabo su trabajo más auténtico y necesario, a pesar de tocar en algunos momentos la fábula obrera a lo "12 hombres sin piedad" en un momento en el que el escepticismo social y el individualismo campan a sus anchas en plan sálvese quien pueda. Marion Cotillard podría ganar por fin el premio a la mejor actriz (comiéndose la pantalla y con algún alegato que es carne de galardón) tras ya brillar en la sección oficial en los dos años anteriores gracias a “De óxido y hueso” y “The immigrant”.

La directora Naomi Kawase compite por cuarta vez por la Palma de Oro con “Still the water”, una de esas películas que suelen quedar bien en los palmarés de los festivales contando con el apoyo de la crítica más sesuda. Un trabajo lirista y sensorial en el que los habitantes de una isla viven en armonía con la naturaleza considerado que en cada parte de la misma vive un Dios. La pareja de jóvenes protagonistas acaba descubriendo el misterio y la fascinación del ciclo de la vida en el que el amor y la muerte juegan un papel fundamental. Un preciosismo que encandila a unos y que a otros irrita por el subrayado parsimonioso de las sensaciones. Aun así, Kawase podría ser una importante contendiente para el premio a mejor dirección como creadora de este universo.

Fuera de competición la sensible historia de amor "Coming home" de Zhang Yimou y un título que ya se presenta como inclasificable. "Lost river", el debut en la dirección de Ryan Gosling, parece erigirse como firme heredero de Nicolas Winding Refn, Leos Carax y del David Lynch más enfermizo en una trama de superación familiar en el Detroit más suburbial y opresivo. Habrá que estar atentos cuando llegue a nuestros cines porque seguro que habrá opiniones para todos.

Y el equipo de "Foxcatcher" en la premiere por la noche de la película tras las buenas críticas cosechadas ayer por la cinta de Bennett Miller.

Nacho Gonzalo