Cannes 2012: “Mud” de Jeff Nichols recibe aplausos y pasiones coreanas

Querido Teo:

Fin de semana de palmarés y por Cannes ya empieza la rumorología, este año más imprevisible que nunca. Una edición decepcionante, más que nada por las esperanzas que había puestas en ella, más que por el nivel de películas. Una sucesión de grandes nombres que no han estado a la altura y ninguna sorpresa que ha terminado de animar el Festival. Además, teniendo a Nanni Moretti como presidente del Jurado, uno puede esperarse cualquier cosa. Si que es verdad que hay que tener en cuenta dos películas que, a pesar de que nos han llegado malos informes sobre ellas, han maravillado a la crítica francesa más sesuda. “Holy motors” de Leos Carax y “Post Tenebras Lux” de Carlos Reygadas parece que tendrán presencia en el palmarés de alguna u otra manera. “Amour” de Michael Haneke es una de las películas que más ha gustado en esta edición pero, quizás, juegue en su contra que el ego de Moretti no esté muy conforme de dar una segunda Palma de Oro a alguien como Haneke. Eso si, Jean-Louis Trintignant y Emmanuelle Riva (leyendas del cine galo) podrían rascar premio de interpretación. “Beyond the hills” de Cristian Mungiu, “The angels´ share” de Ken Loach (que sólo por el buen rollo que ha levantado podría llevarse algo) y “Jagten (The hunt)” de Thomas Vinterberg son también otras apuestas a tener en cuenta.

“Mud” de Jeff Nichols podría sumarse al grupo de favoritas, pero la ligera decepción (la gran palabra del Festival) que ha suscitado puede jugar en su contra. No obstante, finalmente ha sido la mejor película americana de todas las que se han presentado. Lo nuevo del director de “Take shelter” la historia de un fugitivo que se oculta en una isla de Mississippi y se hace amigo de dos muchachos de catorce años, que lo ayudarán. Estos sufren una importante erosión emocional que queda muy bien retratado derivando en un final esperanzador y optimista. La cinta es menos oscura que el anterior trabajo del director, apostando por el tema de la adolescencia en el entorno de la naturaleza, y tiene un toque sensible e iniciático parecido al de cintas como la ochentera “Cuenta conmigo”. Está protagonizada por Matthew McConaughey, Reese Witherspoon y Michael Shannon aunque los que destacan son los críos protagonistas. El pase se ha resuelto con aplausos, así que habrá que tenerla en cuenta en un Festival con poco a lo que agarrarse.

El Festival también termina con la proyección de la exótica y sexual "Do-nui-mat (The taste of money)" de Im Sang-soo procedente de Corea del Sur. Cuenta la historia de Young-jak, el secretario personal de la Señora Paik, la presidenta de un conglomerado de empresas, y testigo mudo de la inmoralidad que reina en la poderosa familia. Cuando descubre que el marido de la presidenta mantiene relaciones con la sirvienta filipina de la casa, se lo cuenta a su jefa, que pretende vengarse de su marido seduciéndole a él. Cada vez más involucrado en los problemas de la familia, Young-jak descubre el cuerpo de la sirvienta, brutalmente asesinada. Una cinta del montón que destaca por la estética y por ese toque de thriller pasional heredero del cine yanqui con humor negro y alguna escena erótica reseñable.

Ha decepcionado en Cannes la proyección del telefilm “Hemingway & Gellhorn”. Le lloverán las nominaciones a los Emmy pero ni la historia ni los efectos (con un croma demasiado cantoso) han logrado enganchar y, ni mucho menos, este trabajo de Philip Kaufman no se sitúa a la altura de otras producciones de HBO.

Sigue la buena racha para el cine hablado en español. Si ayer hablábamos del Gran Premio de la Semana de la Crítica para “Aquí y allá”, ahora es la chilena “No” de Pablo Larraín la que se ha proclamado vencedora en la Quincena de Realizadores. Este film protagonizado por Gael García Bernal tuvo una excelente acogida en su presentación y ha sido adquirida por Sony Pictures Classics para su distribución en los Estados Unidos. García Bernal, quien interpreta a René Saavedra, un chileno exiliado que retorna al país para dirigir la campaña del No para la reelección de Pinochet en el plebiscito de 1988. La crítica hace constantes varios vínculos con la serie televisiva "Mad Men", debido a la temática de la publicidad como timón de la trama y por tratarse de una producción "de época" al ser ambientada en los ochenta, incluso ocupando cámaras con tecnología del período y no las más avanzadas en HD, lo que se nota en la textura del largometraje y permite que se entremezcle con naturalidad con imágenes de archivo.

Nacho Gonzalo (Coronado)