Muchos no entendemos, en realidad, que contaba "Mulholland drive", una de las películas de David Lynch más desconcertantes de toda su filmografía. Años y años después seguimos intentando buscarle interpretaciones en nuestro foro y me temo que nunca saldremos de la duda. ¿Qué pretendía contar David Lynch con esta película?. Eso si, en ella reside un importante apoyo crítico e industrial ya que incluso el realizador vio como lograba con esta cinta su tercera nominación al Oscar como mejor director.
Después de un terrible accidente, una atractiva mujer deambula medio inconsciente hasta que encuentra refugio en una casa. Betty, la sobrina de la propietaria, una joven y guapa aspirante a actriz recién llegada a Los Ángeles, la encontrará totalmente amnésica y decide ayudarla. En su bolso, su única pertenencia, encuentran una llave y un fajo de billetes. Con sólo esas pistas trazarán un recorrido hacia atrás para intentar descubrir la verdadera identidad de la misteriosa mujer.
Esa es la premisa argumental que, a lo largo de la película, se presenta como un apasionante rompecabezas para el espectador más minucioso que ve como toda su trama cae como un castillo de naipes con una desazonante parte final desarrollada en “El club del silencio” que hace que nunca comprendamos bien que es realidad y que es ficción. Para algunos eso sería la magia del cine y del arte y, si es así, “Mulholland drive” cumpliría su objetivo.
Pero, eso si, “Mulholland drive” es una de las películas que por su erotismo tienen que estar en esta sección. Lynch ya jugó con este componente en “Corazón salvaje”, con el juego dialéctico entre Willem Dafoe y Laura Dern en el que éste le susurraba la oído que le dijera la palabra “follame”, y también en “Terciopelo azul” en la que Dennis Hopper no podía resistirse a las bragas de Isabella Rossellini.
Lynch daba un paso más con la escena protagonizada por las dos mujeres del film (Naomi Watts y Laura Elena Harring) en las que dirigidas por un voyeur daban rienda suelta a una escena morbosa y lésbica entre las dos chicas. Naomi Watts declararía que fue la escena de sexo más fácil de rodar en toda su carrera, porque eran mujeres y no había ninguna tensión sexual entre ellas. A pesar de ello, la escena eleva la temperatura. La aparente gelidad que Naomi ha destilado en su carrera posterior quedaba aquí totalmente derretida en uno de sus primeros papeles importantes.
Sin duda, uno de los grandes momentos de una película que, de manera hipnótica y ensoñadora para el espectador, también nos llevaba a esa fábrica de sueños que es Hollywood con continuos homenajes a películas como “Gilda” (el nombre de la protagonista aspirante a actriz es Rita), a “El crepúsculo de los dioses” (la lujosa mansión) o a peluca que se pone Rita y que recuerda a “Vértigo” de Hitchcock.
A mí David Lynch me resulta demasiado desasosegante, extraño y retorcido. Blue Velvet me gustó, aunque despertó extraños sentimientos en mí. El resto.....
Urbinaga
15 años atrás
la pelicula es fabulosa y creo que para entenderla hay que oir la cancion del final que creo que era en castellano o estaba traducida. llorando (mulholland drive)
(http://www.youtube.com/watch?v=oddg6dCB7FE&hl=es) de ahí creo que copió Almodovar o al reves. Dos genios. Almodovar no va de "lesbis" sino todo lo contrario,como es bien sabido. Esperemos que no decaiga como David Lynch, pero los genios son así, el que no serie de TV.Por cierto nada mejor que la serie de TV de Lynch "Twin Peaks ". were is Laura Palmer?
En los últimos años no tenemos temporada de Oscar tranquila y entre “clickbaits” y la ponzoña que sale de las redes sociales las polémicas (unas más baldías que otras) no han dejado de ser protagonistas. Desde hace una semana "Emilia Pérez" está en todo el foco mediático de los Oscar (por el hecho de ser la película más nominada) después de varios meses en los que había quedado más que patente su general división entre fans acérrimos y detractores crueles que no han dudado en cuestionar e incluso ridiculizar a una cinta que incluso ha llegado a convertirse en meme sacando de contexto algunas de sus escenas más tendentes al culebrón en esa explosiva mezcla de géneros que ha sido protagonista de los últimos meses desde que salió con dos premios del Festival de Cannes 2024.
El 26 de octubre de 1970 el mundo deportivo internacional estaba pendiente de un solo acontecimiento: Muhammad Ali, hasta hacía poco Cassius Clay, despojado de sus títulos por la justicia, condenado por no querer ir a Vietnam, volvía a subirse al ring. De fondo burbujeaba algo más: El poder negro. Atlanta representaba el mejor símbolo de la lucha contra el racismo. Policías y autoridades principales eran blancos, con la excepción de uno de los primeros detectives negros de la ciudad, que jugará un papel importante en lo que ocurrió horas después del combate televisado y radiado al mundo entero.
Más de 2.000 libreros franceses han elegido esta historia como la mejor del año. Un hombre, herido por dentro y por fuera por la guerra más cruel del siglo XX, encuentra que hasta en un vertedero de sangre y cenizas puede encontrarse una flor que simboliza la esperanza. Tras el incendio forestal más devastador, que destruye toda vida, lo primero que renace es una planta llamada por ello el lirio de fuego. Desconozco si Marchand conoce este dato, pero es lo que pretende su libro. Lo que comienza como una búsqueda sin esperanza, halla la fuerza de una humanidad capaz de sobrevivir contra todo pronóstico.
"La industria del petróleo y del gas genera 3.000 millones de dólares al día de beneficio. Genera más de 4,3 trillones de dólares al año en ingresos. Es la séptima industria más grande del mundo. Está por encima de la producción alimentaria, la de coches y la minería de carbón y, con 1,4 trillones de dólares, la industria farmacéutica ni siquiera se sitúa entre las tres primeras. Las industrias que se sitúan por delante del petróleo y del gas dependen completamente de ellos. Y cuanto más crecen, más crecemos nosotros. Esa es la escala, así de grande es todo esto. Y no hace más que crecer". Con estas palabras Billy Bob Thornton se dirige a los espectadores en el primer capítulo de la nueva serie de los creadores de "Yellowstone".
A mí David Lynch me resulta demasiado desasosegante, extraño y retorcido. Blue Velvet me gustó, aunque despertó extraños sentimientos en mí. El resto.....
la pelicula es fabulosa y creo que para entenderla hay que oir la cancion del final que creo que era en castellano o estaba traducida. llorando (mulholland drive)
(http://www.youtube.com/watch?v=oddg6dCB7FE&hl=es) de ahí creo que copió Almodovar o al reves. Dos genios. Almodovar no va de "lesbis" sino todo lo contrario,como es bien sabido. Esperemos que no decaiga como David Lynch, pero los genios son así, el que no serie de TV.Por cierto nada mejor que la serie de TV de Lynch "Twin Peaks ". were is Laura Palmer?
Cuiiii!!!