Centenario Wilder: "Perdición", la escena
Querido diario:
Con su tercera película como director en Usamérica, Billy Wilder consiguió su primera nominación en esta categoría de los Oscar, además de volver a repetir en la de mejor guión. Corría el año 1944 y Wilder decidió cambiar momentáneamente de colaborador y escribió el guión de la película junto a Raymond Chandler, y no con Charles Brackett como venía ocurriendo hasta el momento.
En el siguiente video, Wilder nos comenta porque decidió contar con Chandler para el guión de la película.
En esta película, Wilder se adentró en el cine negro, un género en el que la mayoría pensaron que se la pegaría y fracasaría estrepitosamente. Además, como todo lo que haría Wilder en el futuro decidió ser revolucionario y cambiar los típicos esquemas argumentales. En "Perdición" (1944) , los delincuentes no se dedican profesionalmente a ello sino que son personas normales de clase media movidas por los sentimientos más primarios. Más radical todavía es que no se difundan los valores puros de la justicia, sino que Wilder intenta que nos identifiquemos en cierta manera con los malos de la película. Por ese mismo motivo, Brackett no quiso participar en la película. Como dijo Wilder: "Yo estaba entusiasmado con la historia. Le di a Brackett el texto, quien me lo devolvió poco después, sujetándolo sólo con la punta de los dedos. Me dijo que era basura. No quería participar en una porquería semejante, en la que todo sucede a causa de los más bajos motivos. Creo que no quería que su buen nombre apareciera en los créditos de una película tan sospechosa".
Finalmente, el resultado fue un éxito a pesar de las diferencias entre Wilder y el propio Chandler. Además costó convencer a los actores Fred MacMurray y Barbara Stanwyck para que encarnaran a los protagonistas de esta película en la que un vendedor de seguros es chantajeado por la mujer de un hipotético cliente, aprovechándose esta femme fatale de la pasión que él siente por ella para que este lleve a cabo el asesinato de su marido.
La escena que sigue refleja perfectamente la esencia del guión de la película y de la tensión sexual-pasional de los dos protagonistas.