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Querido sobrino:
Visito Palermo y como conozco tus aficiones te cuento que hace mucho tiempo que ha muerto el último duque de Verdura, primo del protagonista de "El Gatopardo".
En cualquier caso, había dejado Italia muchos años antes. Cuando acabó su feliz infancia, sirvió como oficial del ejército en la Primera Guerra Mundial, y antes de que empezara la segunda se había instalado en Hollywood, y luego en Nueva York. Resultó que tenía temperamento de artista, y dotes sociales de las que carecía su tímido y torpe primo. Pronto empezó a diseñar joyas espléndidas y se hizo cargo de la joyeria de Coco Chanel. Se convirtió en el joyero de la "beautiful people" de Norteamérica y Europa, y en una beautifulperson ante litteram, entre cuyos clientes estaban la duquesa de Windsor, Salvador Dalí, Rita Hayworth y Marlene Dietrich. Volvió a Europa para escribir sus memorias, morir y ocupar el último sitio que quedaba en la cripta familiar, en la catedral de Palermo. Las princesas que heredaron Villa Niscemi, la casa donde transcurrre la acción de la historia, también vivían en Norteamérica, y en 1987 se la vendieron al ayuntamiento de la ciudad. Incluso la buganvilla que llameaba fugazmente en la oscuridad en las primeras páginas de El gatopardo, y que aparece en la postal que venden para turistas, había desaparecido cuando llegué a las verjas de Villa Niscemi y crujió bajo mis pies la gravilla del camino bajo el sol de mediodía.
Tu tío que te quiere... Aníbal L.
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